recibe pequeños mensajes de gracia todos los días

viernes, 8 de agosto de 2025

Él Te Satisface Con Larga Vida

 Inspiración De Gracia


“Lo saciaré de larga vida, y le haré ver Mi salvación.”  Salmos 91:16

¡Éste es el versículo final, pero yo creo que también el más importante del Salmo 91!  Si alguna vez tuviste alguna duda de que Dios desea que tú vivas una vida larga y buena, deja que este versículo sea tu respuesta.  Puede ser que estés luchando contra una condición de mala salud en este momento, pero por fe, aferrémonos juntos a este versículo.  En el poderoso nombre de Jesús, yo te veo sanado, saludable y completo.  Te veo fuerte en Cristo y listo para enfrentarte a cualquier gigante delante de ti.

Una de mis imágenes favoritas de larga vida se encuentra en el personaje bíblico Caleb.  Cuando tenía ochenta y cinco años, él dijo: “He aquí, ahora tengo ochenta y cinco años.  Todavía estoy tan fuerte hoy como el día en que Moisés me envió; como era entonces mi fuerza, así es ahora mi fuerza para la guerra.” (Josué 14:10-11)

La imagen de fe aquí de una larga vida no es solo en términos de cantidad el número de días— sino también de calidad salud y fuerza.  Caleb seguía estando tan fuerte a los ochenta y cinco como lo era a los cuarenta y cinco.  Lo que significa que en los últimos cuarenta años en el duro desierto, su fuerza, su juventud y su vigor no disminuyeron.  ¡No hubo fugas, ni retroceso, ni desvanecimiento de su fuerza!

Si tú tal vez piensas que Caleb solo estaba hablando grandezas, mira lo que él dijo a continuación: “Ahora pues, dame esta región montañosa de la cual el Señor habló aquel día, porque tú oíste aquel día que allí había anaceos con grandes ciudades fortificadas; tal vez el Señor esté conmigo y los expulsaré como el Señor ha dicho.” (Josué 14:12)

¡A los 85 años, Caleb estaba listo para luchar con gigantes para apoderarse de una montaña!  ¡Y Caleb hizo lo que dijo!  Lee la evidencia por ti mismo: “Por tanto, Hebrón vino a ser hasta hoy heredad de Caleb, hijo de Jefone cenezeo, porque siguió plenamente al Señor, Dios de Israel.” (Josué 14:14)

¿Quedaste impresionado cuando un joven pastor entró a una pelea con un gigante llamado Goliat?  ¡Deberíamos estar completamente impresionados por este hombre de ochenta y cinco años, que se enfrentó a toda una montaña llena de gigantes!  Caleb era un hombre celoso de la gloria del Señor.  En cuanto a él, había asuntos pendientes porque el Señor les había prometido la montaña hace cuarenta años.

Personalmente creo que su reloj biológico dejó de correr y él básicamente dejó de envejecer porque no mantuvo sus ojos en sí mismo, sino en las promesas del Señor.  Mientras meditas y hallas fortaleza en las promesas de Dios, ¡lo mismo puede sucederte a ti!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

jueves, 7 de agosto de 2025

El Secreto Para Vencer La Condenación

 Inspiración De Gracia


Por consiguiente, no hay ahora condenación para los que están en Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne sino conforme al Espíritu.  Romanos 8:1

No sé ustedes, pero cuando yo leo la Biblia, me siento alentado de que el apóstol Pablo —el apóstol pionero de la gracia— enfrentó las mismas luchas con la carne y con la condenación que tú y yo enfrentamos hoy.  ¿Quién de nosotros no puede identificarse totalmente con su grito frustrado de “… no hago el bien que deseo, sino el mal que no quiero, eso practico…  ¡Miserable de mí!  ¿Quién me libertará de este cuerpo de muerte?”  (Romanos 7:19, 24)  Cuando Pablo estaba luchando bajo la ley, él fue condenado una y otra vez (puedes leer el relato de Pablo sobre su lucha en Romanos 7.

Pero gracias a Dios, Pablo no se detuvo allí.  ¡Él continúa y nos muestra en las Escrituras de hoy que nosotros podemos contrarrestar los ataques del acusador porque ahora no hay condenación para los que están en Cristo Jesús!  Así es, amigo —incluso cuando hay pecado, ahora no hay condenación para los que están en Cristo Jesúspunto.  No hay condiciones ni requisitos previos.  Jesús ya fue condenado por todos nuestros pecados.  Todo se trata de Su obra terminada y no de los esfuerzos del hombre.  Él mismo es la respuesta al grito de ayuda de Pablo.  ¡Aleluya!

Cuando el acusador venga a condenarte por todas tus faltas, declárate a ti mismo justo a causa de lo que Jesús hizo y a que Su sangre te limpia continuamente.  Recuérdate que el Espíritu Santo fue enviado para convencerte de que tu justicia que no depende de obras.  La declaración es verdad en todo momento, todos los días.  Es verdad por la mañana.  Es verdad en la noche.  Y cuando el mañana llegue, seguirá siendo verdad.  ¡Actualmente y continuamente, no hay condenación para ti porque tú estás en Cristo!

Así de liberadora es la gracia de Dios.  Un hermano llamado Jeff me escribió y me contó cómo él había estado gravemente deprimido durante casi 10 meses, y se volvió tan introspectivo y tan consciente de sí mismo, que tuvo ataques de ansiedad.  Él se enfocó en sus acciones y fracasos, y permitió que sus pensamientos condenatorios definieran su identidad y su sentido de valía.  Hambriento y desesperado por recibir respuestas del Señor, él leyó la Biblia y muchos libros de teología, escuchó sermones de varios predicadores e investigó temas bíblicos en línea.  Sin embargo, cuando él trató de aplicar todo este conocimiento a su vida, nada de eso funcionó.  Él todavía se sentía deprimido, derrotado y sin valor.

Luego, él descubrió el evangelio de la gracia a través de uno de mis libros, y esto es lo que experimentó:

Pastor Prince, la enorme carga de tratar de vivir a la altura de la ley durante casi una década, y que me llevó a la depresión, ¡finalmente se me quitó!  Yo ya era cristiano, pero solo fui liberado de esa carga después de que descubrí el verdadero significado de la gracia y la salvación.  ¡Esto fue un cambio de perspectiva tan simple que yo no puedo creer que no lo supiera antes!  No es nuestra capacidad para obedecer la que debe estar en nuestros pensamientos, sino la obediencia de Cristo.

Debido a que ahora yo sé que soy justo en Cristo y que Dios ya no me condena debido a Jesús, ¡ya no tengo más temores porque mi enfoque ahora está en Él y no en mí!  ¡Ahora soy incluso más confiado y feliz de lo que era antes de que la depresión iniciara!

Amado, lo que te dará la confianza para acercarte a Dios es el conocimiento de que hoy, Él es siempre misericordioso y Él te ve completamente justo.  ¡Lo que te hará acercarte confiadamente ante Su trono de gracia es el conocimiento de que Él nunca te condenará porque tú estás en Jesucristo!  Alabado sea Dios, por consiguiente, no hay ahora —presente y continuamente— ninguna condenación para los que están en Cristo Jesús.  ¡Esta es la Palabra de Dios para ti hoy!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

miércoles, 6 de agosto de 2025

Revelando El Corazón Del Padre

 Inspiración De Gracia


Y levantándose, fue a su padre.  Y cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio y sintió compasión por él, y corrió, se echó sobre su cuello y lo besó… Pero el padre dijo a sus siervos: “Pronto; traed la mejor ropa y vestidlo, y poned un anillo en su mano y sandalias en los pies; y traed el becerro engordado, matadlo, y comamos y regocijémonos; porque este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida; estaba perdido y ha sido hallado.”  Lucas 15:20, 22-24

Una de las parábolas más hermosas de la Biblia es la parábola del padre del hijo pródigo. (Lucas 15:11–32)  Muchos comentaristas la llaman la parábola del hijo pródigo, pero el verdadero héroe de esta historia es el padre y su amor por sus dos hijos.  Esta es una parábola que Jesús usó para revelarnos hábilmente el verdadero corazón de nuestro misericordioso y amoroso Padre celestial.

Por favor, tómate unos minutos para leer la parábola completa y mientras la lees, considera esto: ¿Cuál es tu opinión de Dios, especialmente cuando te has equivocado?  ¿Lo ves como un juez todopoderoso, distante e insensible que se enoja cuando fallas y que constantemente tiene que ser apaciguado?  ¿O lo conoces como tu Papi, tu Abba Padre a quien puedes acudir en cualquier momento, incluso cuando le has fallado?  ¿Lo ves esperando inquebrantable y pacientemente a que tú regreses a Él y luego corriendo por el camino para encontrarte, con lágrimas corriendo por Su rostro, abrazándote y regando Sus besos sobre ti?

Mientras estudiaba la Palabra, el Señor me reveló que muchos creyentes han llegado a un lugar en donde se han olvidado de su Padre celestial.  Se han olvidado de Su amor, Su gracia y Su bondad amorosa.  Ellos se relacionan con Dios de una manera judicial y transaccional, se presentan ante Él con aprensión y temor, le presentan sus fallas y se van rápidamente antes de recibir el castigo y la condenación que ellos creen que ciertamente merecen de Él.  Ellos lo perciben exclusivamente como un Dios de santidad, juicio y justicia —Su rostro duro y severo, Sus poderosos brazos cruzados en descontento y desaprobación.  Ellos ven a un Dios que se enfada fácilmente, que se enoja rápidamente, que está perpetuamente decepcionado de ellos y que espera con impaciencia ser aplacado.

Esta creencia errónea de quién es Dios realmente ha llevado a muchos al temor, la culpa, la depresión y la inseguridad.  Y es por eso que es tan vital que nosotros veamos el corazón del Padre como Jesús lo reveló en esta parábola eterna.

Amado, ¿ves Su corazón que está lleno de amor por ti?  Hay un vacío en nuestros corazones que solo puede ser llenado por el amor del Padre.  Yo creo que si tú permites que el Padre entre en tu corazón hoy y te llene con Su perfecto amor, encontrarás el gozo, la confianza, la plenitud y la libertad que has estado buscando en la vida.

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince 

martes, 5 de agosto de 2025

Momentos Selah

 Inspiración De Gracia


¡Oh Señor, cómo se han multiplicado mis adversarios!  Muchos se levantan contra mí.  Muchos dicen de mí: “Para él no hay salvación en Dios.” (Selah)  Mas Tú, oh Señor, eres escudo en derredor mío, mi gloria, y el que levanta mi cabeza.”  Salmos 3:1-3

Mientras lees lo que le sucedió a David mientras clamaba a Dios en los versículos anteriores, observa el selah en el salmo.  Vas a encontrar esos “momentos selah” a lo largo de los salmos de David.  Eso significa que David hizo una pausa... y escuchó.

En esos momentos, David apartó los ojos de sus problemas y miró a su Dios.  En esos momentos, yo creo que él recordó nuevamente que él no tuvo que pelear sus batallas porque el Señor de los ejércitos peleó por él. (1 Samuel 17:45–47)  Él recordó nuevamente al Dios que lo había librado de las garras del león y de las garras del oso, el Dios que venció a Goliat sin espada ni lanza.  Y mientras miraba al Señor, él se fortaleció en el Señor (1 Samuel 30:6), y fue entonces que las cosas comenzaron a cambiar.

El cambio vino cuando él quitó su enfoque de sus circunstancias dolorosas y terribles, y se dejó absorber por la gracia del Señor, cuando él hizo una pausa y se sintonizó con lo que el Señor le estaba animando en su interior.  Yo creo que en esos breves momentos de meditar en la bondad y la misericordia de Dios, él escuchó al Señor decirle: “David, ¿por qué estás preocupado por toda esta gente que viene contra ti?  Yo soy tu escudo.  Yo soy la gloria y el que levanta tu cabeza.”  Eso fue lo que causó el punto de inflexión de David en esa situación.  El consuelo de Dios vino a David cuando él eligió el selah.

¿Te parece como que tus enemigos han aumentado y muchos se están levantando contra ti?  ¿Has estado recibiendo un informe médico negativo tras otro?  Quizás encontraron mucho más de que preocuparse que lo que sabías anteriormente.  Y ahora tu corazón está cargado porque sientes como que quizás ni siquiera Dios pueda ayudarte.

En momentos como este, haz lo que hizo David.  Selah.  Haz una pausa y elige correr hacia el Señor en presencia de tus enemigos.

Cuando David volvió al salmo, sus enemigos todavía estaban allí.  Pero él pudo levantarse y declarar: “Mas Tú, oh Señor, eres escudo en derredor mío, mi gloria, y el que levanta mi cabeza.”

En tus momentos selah con el Señor, tú encontrarás tu punto de inflexión y tu victoria.  No te desanimes.  No huyas de Él.  Corre hacia Él y adóralo.

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

lunes, 4 de agosto de 2025

Los Buenos Frutos Se Producen Bajo La Gracia

 Inspiración De Gracia


Pero temo que, así como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestras mentes sean desviadas de la sencillez y pureza de la devoción a Cristo.  2 Corintios 11:3

Hay algo de lo que me gustaría que tú fueras consciente hoy.  El enemigo, aunque fue derrotado en la cruz, es un adversario astuto.  Él hace que las personas se aparten de la simplicidad del evangelio hacia las obras, porque él sabe que muchos creyentes son sinceros en querer agradar a Dios.

Él sabe que ellos tienen un entusiasmo o celo por Dios.  Pero también sabe que el hombre tiene algo que se llama orgullo.  Entonces, ¿qué hace?  Él se aprovecha de su orgullo y desvía su celo usando la ley.  Él les dice: “¿Quieres estar bien con Dios y agradarle?  Entonces aquí están Sus leyes para que las obedezcas y debes obedecerlas a la perfección.”

En el libro de Romanos, Pablo habla de este celo equivocado, que prevalecía entre sus hermanos judíos:

"Amados hermanos, el profundo deseo de mi corazón y mi oración a Dios es que los israelitas lleguen a ser salvos.  Yo sé que ellos tienen un gran entusiasmo por Dios, pero es un fervor mal encauzado.  Pues no entienden la forma en que Dios hace justas a las personas ante Él.  Se niegan a aceptar el modo de Dios y, en cambio, se aferran a su propio modo de hacerse justos ante Él tratando de cumplir la ley."  —Romanos 10:1–3, NTV

Eso mismo sigue sucediendo hoy.  Muchos creyentes, en su celo por Dios o su orgullo, están tratando de agradar a Dios y volverse justos al tratar de guardar la ley.  Ellos no comprenden que Dios justifica a una persona únicamente por la gracia mediante la fe.  Ellos rechazan el camino de Dios y se aferran a lo que ellos piensan que los hace justos —su obediencia a las leyes de Dios.

Sin embargo, la ironía de todo esto es que al tratar de guardar las leyes de Dios para ser justos, las personas producen obras de la carne como adulterio, fornicación, odio, herejías y embriaguez. (Gálatas 5:18-21)  ¿Por qué?  Porque “el poder del pecado es la ley.” (1 Corintios 15:56)  La ley despierta o agita las pasiones pecaminosas dentro de nuestra carne. (Romanos 7:5)

Gálatas 5:22–23 enumera el fruto del Espíritu como “amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, dominio propio.”  Nota que Pablo menciona el fruto del Espíritu hasta el quinto capítulo.  En los primeros cuatro capítulos, él habla de la gracia, contrastándola con la ley y debatiendo fervientemente por la justificación por la fe, porque los cristianos de Galacia estaban regresando a estar bajo la ley.  Pablo estaba esencialmente devolviéndolos a la gracia pura, antes de hablarles sobre el fruto del Espíritu.

¿Puedes ver cómo el fruto de estar bajo la gracia es el fruto del Espíritu?  Nota también cómo Pablo lo llama las obras de la carne y el fruto del Espíritu.  ¿Cuál es la diferencia entre “obras” y “fruto”?  Las obras son el resultado del esfuerzo propio que surge de estar sometido a las duras exigencias de la ley.  ¡El fruto es el resultado de la vida!  Tal como un árbol naturalmente producirá buenos frutos cuando está bien regado y recibe la cantidad adecuada de luz solar, así un cristiano producirá buenos frutos sin esfuerzo propio cuando él o ella estén siendo bien regados por la palabra de Su gracia y estén expuestos a la luz del amor de Dios.

Amado, si tú quieres exhibir el fruto del Espíritu, asegúrate de estar escuchando la gracia pura de nuestro Señor Jesús que te recuerda que tú estás justificado por la fe en el Cordero que murió por ti.  Esto te ayudará a edificar tu vida sobre la Roca sólida de Cristo y el fundamento firme de Su obra terminada.  Lucha fervientemente para escuchar y vivir el verdadero evangelio, por la gracia a través de la fe.  Esto te llevará a la tierra prometida, porque el evangelio es el poder de Dios para tu salvación en cada área de tu vida.

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

domingo, 3 de agosto de 2025

La Gracia Y La Verdad Son Una

 Inspiración De Gracia


Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia [favor inmerecido] y la verdad vinieron por medio de Jesucristo.  Juan 1:17, RVR60

¿Sabías que Dios ve la gracia (favor inmerecido) y la verdad como una y la misma cosa?  Nota en Juan 1:17 que la verdad está del mismo lado que el favor inmerecido de Dios, y tanto la gracia (favor inmerecido) como la verdad vinieron por medio de Jesucristo.  Cuando hice un estudio de este versículo en el griego original, encontré que en realidad se está refiriendo a “la gracia y la verdad” como una unidad singular, ya que estas van seguidas del verbo singular “vino”.  En otras palabras, a los ojos de Dios, la gracia y la verdad son sinónimos —el favor inmerecido es la verdad y la verdad es el favor inmerecido.

A veces, las personas me dicen cosas como: “Bien, es bueno que tú prediques la gracia, pero también tenemos que hablarle a las personas acerca de la verdad.”  Esto hace que parezca que la gracia y la verdad son dos cosas diferentes cuando, de hecho, estas son una y la misma.  No se puede separar la verdad de la gracia y la gracia de la verdad, ya que ambas están encarnadas en la persona de Jesucristo.  De hecho, sólo unos cuantos versículos antes que este, Juan 1:14, refiriéndose a la persona de Jesús, dice: “Y el Verbo se hizo carne, y habitó entre nosotros, y vimos Su gloria, gloria como del unigénito del Padre, lleno de gracia [favor inmerecido] y de verdad.  La gracia y la verdad vinieron juntas a través de la persona y el ministerio de Jesús.  La gracia no es una doctrina ni una enseñanza.  La gracia es una Persona.

Esto contrasta con el antiguo pacto de la ley, que fue dada por medio de Moisés en el monte Sinaí.  Podemos ver que Dios es muy preciso al tratar con los dos pactos y no los mezcla.  La gracia es gracia y la ley es ley.  La gracia vino por medio de Jesús mientras que la ley fue dada por medio de Moisés.  Jesús no vino a darnos más leyes.  ¡Él vino a darnos Su favor inmerecido, que es Su verdad!  Sería un inmenso beneficio para ti tener en mente cada vez que leas la palabra “gracia” en la Biblia, traducirla como “favor inmerecido”, porque eso es lo que es.

Amigo, “la gracia vino”.  Una cosa es dar y otra cosa es que algo venga.  Verás, yo puedo enviarte un DVD de mi prédica en lugar de ir (venir) a ti.  Pero si yo voy a ti, lo hago algo personal.  La ley fue dada por Moisés, pero la gracia vino por Jesucristo.  Todo sistema de moralidad trata sobre el hombre intentando alcanzar a Dios con su disciplina y sus buenas obras, pero en el cristianismo, ¡Dios bajó a donde nosotros estábamos para levantarnos hasta donde Él está!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

sábado, 2 de agosto de 2025

El Perdón Y La Sanidad Van De La Mano

 Inspiración De Gracia


Viendo Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: “Hijo, tus pecados te son perdonados… Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene autoridad en la tierra para perdonar pecados” (dijo al paralítico): “A ti te digo: Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.”  Y él se levantó, y tomando al instante la camilla, salió a la vista de todos, de manera que todos estaban asombrados, y glorificaban a Dios, diciendo: “Jamás hemos visto cosa semejante.”  Marcos 2:5, 10-12

Te animo a comenzar el día con este pensamiento: la manera de salir de la conciencia de pecado es escuchar más enseñanzas acerca de la obra terminada de Jesús y de cómo Su sangre nos ha limpiado y nos ha perdonado todos nuestros pecados.  Cuando tú creas que tus pecados ya fueron castigados en el cuerpo de Jesús y lo recibas a Él como tu ofrenda por el pecado, tu corazón será rociado con Su sangre, purificado de una mala conciencia.   A medida que escuchas enseñanzas que exaltan a Cristo, en lugar de llevar una consciencia de pecado y condenación en tu mente y corazón, tú serás lavado con el agua pura de la Palabra de Dios.  ¡Esto a su vez afectará tu cuerpo físico y traerá sanidad a cada parte que no esté bien!

Algunos cristianos no pueden recibir sanidad para sí mismos o dentro de sus familias porque no son capaces de recibir perdón.  Ellos aún son conscientes de pecado y dudan de su perdón.  Ellos creen que Dios puede haber perdonado sus pecados pasados, pero no los pecados de toda su vida.  Dios sabe que las personas necesitan la seguridad de que sus pecados fueron perdonadosantes de que puedan recibir sanidad en sus cuerpos, por eso la Biblia deja muy claro Su perdón de nuestros pecados.  En el Salmo 103, cuando el salmista enumera los “beneficios” del Señor, él comienza con “el que perdona todas tus iniquidades” antes de pasar a “el que sana todas tus enfermedades.”

No hace mucho, recibí este testimonio de Patricia, que vive en Sudáfrica.  A su esposo le diagnosticaron cáncer y se estaban preparando para ir al hospital para su tomografía por emisión de positrones (PET), cuando ella leyó uno de mis devocionales diarios sobre la Santa Cena.  Sintiéndose consumida por la preocupación por su esposo y la condenación de no poder confiar la situación completamente en las manos del Señor, ella tomó la Santa Cena y por primera vez, discernió que el cuerpo de Jesús fue golpeado para que nuestros cuerpos pudieran ser sanados y perfeccionados.  Ella también meditó sobre cómo la sangre de Jesús fue derramada para el perdón de nuestros pecados.  Después de eso, Patricia dijo: “Yo sentí una paz que solo Dios podía dar.  Pude entrar en un estado de descanso y fe, sin ningún esfuerzo de mi parte.  Me enorgullece decir que mi Salvador reina.  No se encontró cáncer en los órganos de mi esposo y los médicos no pudieron explicar por qué.”  ¡Qué testimonio tan asombroso sobre el poder de saber que estás perdonado en Cristo!

En Marcos 2:1–12, leemos el relato del paralítico que fue bajado por el techo y colocado frente a Jesús.  Jesús le dijo al paralítico: “Hijo, tus pecados te son perdonados,” antes de decirle: “Levántate, toma tu camilla y anda.”  ¿Por qué?  Porque Jesús sabía que a menos que el hombre tuviera la seguridad de que todos sus pecados habían sido perdonados, él no tendría la fe para levantarse, tomar su camilla y salir de esa casa.

Amado, tus pecados te fueron perdonados.  Deja de castigarte y condenarte a ti mismo.  ¡Cree en la verdad del Evangelio y deja que tu conciencia esté satisfecha!  Comienza a disfrutar de todos Sus beneficios porque estos son tus derechos comprados con sangre.  El perdón es tuyo.  La sanidad es tuya.  La redención de la destrucción es tuya.  Ser coronado de bondad amorosa y tiernas misericordias es tuyo.  ¡Aleluya!  ¡Simplemente cree que tu deuda por el pecado ha sido saldada y camina en estas bendiciones hoy!

Viendo a través de los ojos de la fe,  

Joseph Prince 

viernes, 1 de agosto de 2025

El Poder De Su Amor Y Gracia

 Inspiración De Gracia


Y el Dios de paz aplastará pronto a Satanás debajo de vuestros pies.  La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con vosotros.  Romanos 16:20

La gracia es la única cosa contra la que el diablo no tiene defensa.  Si tú estás dependiendo de tu esfuerzo propio para ganarte la aprobación de Dios, el diablo tiene poder sobre ti porque él siempre puede señalar algo que tú no has hecho.  Esto le da a él dominio sobre ti.  Si tú pides la protección y sanidad de Dios basándote en lo que has hecho, el diablo, que es un acusador maestro, solo tiene que señalar una de tus faltas y toda tu fe será derrumbada.  Vas a descalificarte a ti mismo mentalmente e interiormente de recibir cualquier cosa por la que puedas estar esperando en el Señor.

Pero la gracia nos califica para protección.  Debido a que Jesús pagó el precio, nosotros que estamos en Él tenemos derecho a caminar en salud y protección divinas.  Cuando el diablo te acusa, diciendo: “¿Cómo te atreves a esperar la protección de Dios cuando tú has estado haciendo (él puede enumerar una lista de tus faltas)?”, tú solo tienes que señalar la sangre de Jesús que ha pagado por todas tus faltas.  ¡Con la gracia como base, el Dios de paz puede reinar sobre tus temores e impartirte una fe inquebrantable acerca de Su protección!

Algo más sucede cuando tú comprendes Su gracia —tú también creces en la comprensión de cuán perfectamente amado eres por tu Padre celestial.  Dios nos amó tanto a ti y a mí, que envió a Su Hijo unigénito a morir en la cruz por nosotros, llevando todos nuestros pecados sobre Su propio cuerpo para que hoy, nosotros podamos presentarnos confiadamente ante Su trono de gracia.  Él lo hizo para que hoy nosotros no seamos como ovejas sin pastor, sino seamos profundamente amados y cuidados por nuestro Abba Padre.  Nosotros somos Sus hijos y cuando clamemos a Él, Él VA A responder.  Tenemos un Dios que demostró Su amor por nosotros cuando nosotros aún éramos pecadores —¡cuando no teníamos nada que ofrecerle a Él sino nuestro quebrantamiento, nuestra vergüenza, nuestros pecados y nuestras descalificaciones!  ¡Oh, qué perfección hay en Su amor!

La Palabra de Dios dice: “En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor, porque el temor involucra castigo, y el que teme no es hecho perfecto en el amor.  Nosotros amamos, porque Él nos amó primero.” (1 Juan 4:18-19)  ¿Tienes temor hoy?  Hazte esta pregunta: ¿Sabes lo mucho que Dios te ama?  Verás, no puedes alejar el temor con razonamientos.  Pero cuando recibes la revelación de Su perfecto amor por ti, todo temor en tu vida es echado fuera.  ¡En la medida en que tú comprendas Su amor por ti, vas a vivir libre de temores en tiempos peligrosos!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince 

jueves, 31 de julio de 2025

Pide En Grande

 Inspiración De Gracia


“Y todo lo que pidáis en Mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.”  Juan 14:13

Quiero comenzar este devocional con un desafío: ¡Pídele a Dios grandes cosas!

¿Qué deseas ver en tu vida —en tu familia, tu salud, tus finanzas y tu carrera?  ¿Qué le pedirías a Dios si supieras sin lugar a dudas que Él es bueno y que Su amor por ti es para siempre?

¡Pídesel0 a Dios!   Jesús vino para que tú vivas una vida marcada no por la escasez, sino por la abundancia; no por la desesperación, sino por la plenitud de Su amor, gozo y paz.

Me gustaría que escribieras en tu diario lo que le pedirías a Dios si supieras que Él escucha tus oraciones.  ¿Cuáles son tus sueños, esperanzas y aspiraciones?  ¿Qué te gustaría que sucediera en tu vida?  ¿Con qué estás luchando hoy?  ¿En qué área de tu vida te gustaría ver actuar el poder de Dios?

Escríbelo.  Escríbelo todo.  Escribe lo que quieres que suceda, con la esperanza bíblica en tu corazón de que Él te escucha y te lo proveerá.  Escribe con una expectativa segura, alegre, positiva y confiada, de bien.

No te limites a pedirle a Dios cosas pequeñas.  ¡Pídele cosas grandes!  Por ejemplo, no solo le pidas un trabajo.  Pídele una posición de influencia.  No te limites a pedirle que te restaure la salud.  Pídele una vida larga y saludable llena de muchos días buenos.

Amplía tu fe para creer en la bondad de Dios.  Él se complace cuando nuestra fe es grande.  Él no se ofende cuando le pedimos cosas grandes.

¿Lo harías ahora mismo?  Toma un momento y escribe tus peticiones a Dios, quien es todopoderoso y tiene más poder del que podamos imaginar.

Dios, quien colgó los planetas en su lugar y habló orden en el mundo.  Dios, quien guio a Su pueblo en una columna de nube durante el día y una columna de fuego durante la noche.  Dios, que hizo llover maná del cielo y sacó agua de la roca seca.

Dios, quien convirtió el agua simple en el mejor vino.  Dios, quien hizo andar a los cojos, hizo ver a los ciegos y oír a los sordos.  Dios, quien multiplicó cinco panes y dos pequeños peces para alimentar a cinco mil hombres.  Dios, quien resucitó de los muertos y conquistó la tumba.

¡Pídele lo que necesitas a Dios, quien TE AMA con amor eterno!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince 

miércoles, 30 de julio de 2025

Salvarte Es La Descripción Del Trabajo De Jesús

 Inspiración De Gracia


Pero mientras pensaba en esto, he aquí que se le apareció en sueños un ángel del Señor, diciendo: “José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque el niño que se ha engendrado en ella es del Espíritu Santo.  Y dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús, porque Él salvará a Su pueblo de sus pecados.”  Mateo 1:20-21

El nombre “Jesús” es Yeshua en hebreo, el cual es una abreviatura de Yahweh, el nombre de Dios en hebreo.  ¡Así que el nombre “Jesús” significa literalmente Yahweh es nuestro Salvador” o “El Señor es nuestro Salvador”!  ¡Que hermoso nombre!

Cada vez que dices el nombre de Jesús, el nombre que está por encima de cualquier otro nombre, tú estás llamando a Dios Mismo para que te salve.  ¡Salvarte es la descripción del trabajo de Jesús!

Cualquiera que sea la dificultad o la circunstancia, cualquiera que sea la crisis en la que te encuentras —física, financiera o emocionalmente— tú puedes invocar el nombre de Jesús y el mismo Dios Todopoderoso te salvará.

Amigo, puedes tomarte un tiempo para conocer los nombres de Dios, los cuales Él reveló bajo el antiguo pacto, como Elohim, El Shaddai, El Elyon, Jehová-Jireh, Jehová-Rophe y Jehová-Nissi.  Tú puedes hacer un estudio completo sobre los nombres de Dios.

Yo no estoy en contra de eso, en absoluto.  Yo también enseño los nombres de Dios en mi iglesia, pero todos estos nombres no significarán nada para ti si tú no sabes que el mismo Dios Todopoderoso, Jesús, quiere salvarte primero de todos tus pecados y luego de todas tus dificultades.

Dios puede ser todopoderoso, pero si tú no estás segurode que Él está interesado en que tú tengas éxito, Su poder no significará nada para ti.  Por lo tanto, no es necesario que memorices todos los nombres de Dios del antiguo pacto.  ¡Lo que tú necesitas es una revelación completa de que Jesús, en el nuevo pacto, es tu Salvador!

¿Por qué es famoso Tiger Woods?  ¡Por el golf!  ¿Por qué es famoso David Beckham? ¡Por el fútbol!  (¡También es famoso porque promociona productos!)  ¿Por qué es famoso Jesús?  ¡Por salvarte!

¿De qué necesitas ser salvado hoy?  ¡Míralo a Él en tu situación, rescatándote, protegiéndote y proveyendo para ti!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

martes, 29 de julio de 2025

Participa Del Árbol De La Vida

 Inspiración De Gracia


Y sucedió que al sentarse a la mesa con ellos, Él tomó pan, y lo bendijo; y partiéndolo, les dio.  Lucas 24:30

En Lucas 24:30–31, Cristo habiendo resucitado participó de la Santa Cena con los dos discípulosen la aldea de Emaús.  ¡Qué divino honor puso el Señor Jesús en el partimiento del pan, en esta maravillosa comunión que Él ha dado a la Iglesia!

Es por esto que en mi iglesia, nosotros tomamos la Santa Cena todas las semanas.  Eso es lo que hacía también la iglesia primitiva.  El libro de los Hechos nos dice que los discípulos “estaban reunidos para partir el pan” el“primer día de la semana” (Hechos 20:7)  ¿No deberíamos nosotros entonces enfatizar esto que nuestro Señor Jesús hizo que fuera algo central?

Sabemos que Dios hizo a Adán y Eva completos, excepto por una cosa: sus ojos espirituales no estaban abiertos.  Dios quería que sus ojos espirituales fueran abiertos por el Árbol de la Vida, pero en cambio, ellos participaron del Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal, y sus ojos se abrieron para ver su desnudez.  Sus ojos fueron abiertos para ver sus fracasos y defectos, su escasez y sus deficiencias, su pecado y su vergüenza.

Pero nuestro Señor Jesús estaba restaurando todo lo que se perdió en ese jardín.  Yo creo que cuando Él partió el pan para los dos discípulos, Él les estaba dejando comer del Árbol de la Vida, el árbol del que Dios había querido que el hombre comiera.  Nuestro Señor Jesús es el Árbol de la Vida y cuando nosotros participamos de Su cuerpo partido, estamos comiendo del Árbol de la Vida.

Es por eso que en el momento en que los dos discípulos tomaron el pan, les fueron abiertos los ojos y ellos reconocieron al Señor Jesús.  El apóstol Pablo también oró para que nuestros ojos fueran abiertos, para que podamos ver a Jesús, para que podamos verdaderamente tener una revelación de Su amor. (Efesios 1:17-18, 3:18-19)  Yo había estado escudriñando las Escrituras por años para averiguar más sobre el Árbol de la Vida y me emocioné mucho cuando el Señor me mostró esto.

Después de que los dos discípulos participaron del Árbol de la Vida, yo creo que algo les sucedió a sus cuerpos: ellos fueron infundidos y energizados con la vida de resurrección de Cristo.  Fue por eso que ellos pudieron levantarse en esa misma hora para caminar de regreso a Jerusalén (Lucas 24:33), cubriendo veintidós kilómetros en un día. (Lucas 24:13)  Hoy nosotros podemos regocijarnos porque esa misma vida de resurrección fluye hacia nuestros cuerpos cada vez que nosotros participamos de la Cena del Señor.

Por cierto, después de que Adán y Eva pecaron, sus corazones se volvieron fríos por el temor y ellos se escondieron cuando escucharon la voz de Dios en el jardín. (Génesis 3:10)  Pero mientras Cristo habiendo resucitado, caminaba con los dos discípulos en el camino a Emaús, sus corazones ardían de amor por Jesús(Lucas 24:32) y ellos querían permanecer más tiempo en Su presencia. (Lucas 24:29)

Nuestro Señor Jesús restauró la relación con Dios que se fracturó y se perdió cuando Adán y Eva cayeron, y hoy nosotros no tenemos por qué tenerle miedo al Señor.  Cualesquiera sean las dificultades que se nos presenten, nosotros podemos tener la confianza de que Él está de nuestro lado (Romanos 8:31) y que podemos acercarnos con toda confianza a Su trono de gracia. (Hebreos 4:16)

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince