recibe pequeños mensajes de gracia todos los días

jueves, 8 de agosto de 2019

No Es El Fin Cuando El Señor Está Contigo

Medita En
Y vio su amo [Potifar] que el Señor estaba con él y que el Señor hacía prosperar en su mano todo lo que él hacía.  (Génesis 39:3)
¿Conoces a alguien que esté en una situación peor que la de José cuando él estaba desnudo en un mercado egipcio, esperando ser vendido como esclavo?  Todo su mundo parecía haberse derrumbado a su alrededor.  Solo unos días antes, él estaba siendo abrazado por su padre, pero ahora, sus propios hermanos lo habían traicionado.  Todo lo que poseía le había sido despojado.  Él había sido reducido a nada más que un esclavo en una tierra extranjera.
¿Era este el final de José?  En el esquema natural de las cosas, parecía que lo era.  Pero incluso con las probabilidades aumentando en contra de José, el Señor estaba lejos de haber terminado.  ¡Incluso en esta terrible situación, el Señor estaba con José, y en esta coyuntura oscura y desolada en la vida de José, el Señor lo llamó un hombre exitoso! (Génesis 39:1–2)  Recuerda, no es lo que tienes.  Es a quien tienes lo que marca la diferencia.
“¿Cómo puede el Señor hacer que un joven esclavo sin un solo centavo o posesión a su nombre tenga éxito?”
Bueno, continuemos con la historia de José.  Génesis 39:3 nos dice: “Y vio su amo [Potifar] que el Señor estaba con él [José] y que el Señor hacía prosperar en su mano todo lo que él hacía.”  Esta es una declaración poderosa y ofrece la promesa de que puedes creerle a Jesús en cada área de tu vida.  ¿Puedes imaginar que cada proyecto, asignación e incluso las diligencias que emprendas sean prosperadas?  Tus manos convertidas en manos de bendición.
Cuando tocas a los miembros de tu familia, ellos son bendecidos.  Tu empresa puede estar luchando con el manejo de un proyecto difícil, pero una vez éste es puesto en tus manos, el proyecto se vuelve bendecido.  ¡Tú te conviertes en una bendición que está esperando ocurrir para alguien y para algo, a donde sea que vayas!
Ahora, ¿cómo va a suceder esto?  El Señor Jesús hará que suceda cuando tú dependas de Él de la misma manera en que José dependía de Él.  José no tenía nada.  Él no podía confiar en sus habilidades o experiencia (nunca antes había sido un esclavo), ni podía confiar en sus conexiones naturales (su padre estaba fuera de escena porque creía que José había sido asesinado por un animal salvaje).  ¡Todo lo que José tenía era la presencia del Señor y él dependía del Señor para la manifestación de Su presencia, Su poder y Su gloria a través de él!
¡Eso es lo que tú y yo necesitamos —una manifestación de Su presencia en todo lo que hacemos!  Verás, una cosa es tener Su presencia (todos los cristianos tienen Su presencia porque lo han aceptado a Él como su Señor y Salvador personal), pero cuando Su presencia se hace manifiesta en tu vida, allí es cuando Su gloria brilla a través de ti.
Amigo, Dios quiere hacer que todo lo que tú hagas prospere, tal como lo hizo por José.  ¡Obsérvalo este día dirigiéndote, bendiciéndote, y aumentando tu efectividad!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

No hay comentarios:

Publicar un comentario