Medite En
… “Dios resiste a los soberbios, pero
da gracia a los humildes.”
1ª Pedro 5:5
En sus
primeros 40 años, como un príncipe egipcio que era visto hacia arriba y admirado,
Moisés pensaba que lo sabía todo. La Biblia dice que él era “poderoso en palabras
y en hechos” (Hechos 7:22). Sin embargo, Dios no podía usarlo para liberar
a Su pueblo de la esclavitud en Egipto.
Sin
embargo, en los siguientes 40 años, algo le sucedió a Moisés. Él huyó de Egipto después de matar a un
egipcio que estaba golpeando a un hebreo, y se fue a vivir al desierto de
Madián. Se convirtió en un pastor y ya no era considerado
poderoso en palabras, ni en hechos. De hecho, él incluso se había vuelto tartamudo
(Éxodo 4:10). Y fue en este momento de su vida, cuando él
probablemente pensó que era alguien acabado, y que sus días de gloria habían
quedado atrás, que Dios se le apareció y le dijo: “... Yo te enviaré a Faraón,
para que saques a mi pueblo… de Egipto” (Éxodo 3:10). ¡Dios
finalmente podía utilizar Moisés!
La Biblia
nos dice que “Dios resiste a los soberbios, pero da gracia a los humildes.” Amado, Dios no va a imponer Su gracia sobre
nosotros. Siempre que queramos depender de nosotros
mismos y de nuestra sabiduría para triunfar, Él se hará a un lado y nos permitirá
hacerlo. Su
gracia es dada a aquellos que humildemente reconocen que no pueden triunfar en
sus propias fuerzas y habilidades. Así que cuando nos desprendamos de nuestros propios
esfuerzos y humildemente dependamos de Su gracia, ¡Él se hará cargo y hará en
nosotros, y a través de nosotros, lo que no podemos hacer por nosotros mismos!
Bendiciones,
Joseph Prince
Joseph Prince
Hechos 7:22 “ Y Moisés fue instruido en toda la sabiduría de los egipcios, y era un
hombre poderoso en palabras y en hechos.”
Éxodo 4:10 “Entonces Moisés dijo al Señor: Por favor,
Señor, nunca he sido hombre elocuente, ni ayer ni en tiempos pasados, ni aun
después de que has hablado a tu siervo; porque soy tardo en el habla y torpe de
lengua.”
Éxodo 3:10 “Ahora pues, ven y te enviaré a Faraón, para
que saques a mi pueblo, los hijos de Israel, de Egipto.”
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