recibe pequeños mensajes de gracia todos los días

domingo, 30 de septiembre de 2018

Poder Del Cuerpo De Jesús Al Tuyo


“… Tomad, comed; esto es Mi cuerpo.”
Mateo 26:26
¿Puedes imaginar enfermo al Señor, con un resfriado o fiebre mientras andaba en la tierra?  ¡No, nuestro Señor Jesús nunca estuvo enfermo!  Él era vigoroso, lleno de vida y lleno de salud.  Cuando le dijo a Sus discípulos: “Tomad, comed; esto es Mi cuerpo,” ellos pudieron visualizar prácticamente lo que eso significaba porque habían vivido y caminado con ese Hombre.  Habían visto personas sin manos o pies que fueron sanados cuando tocaron Su cuerpo.  (Mateo 15:30-31)
¡Aún Sus ropas estaban impregnadas con Su salud!  Una mujer que tenía un flujo de sangre durante 12 años —ningún doctor la había podido sanar— fue sanada inmediatamente cuando tocó el borde de Su manto.  Y si el borde de Su manto estaba impregnado con Su salud, vitalidad, energía y resplandor divino, ¡cuánto más Su cuerpo!
Sabes, unos de los versículos más alentadores de los Evangelios, son estos: “… Y todos los que lo tocaban quedaban curados,(Marcos 6:56)  “… porque de Él salía un poder que a todos sanaba.(Lucas 6:19)  ¡Amo estos versículos!  ¡Ese es nuestro Jesús!
La Biblia dice que ellos ponían a los enfermos en las plazas, y Jesús caminando alrededor, los tocaba y los sanaba.  Ahora, ves a las estrellas de cine hacer esto: Ellos corren de aquí para allá,  le dan la mano a sus seguidores, sin embargo nadie es sanado.  Pero a donde sea que Jesús iba, a quien quiera que Él tocara, lo sanaba.  Imagina esto: Una impresión de las personas.  Aquellos en frente de Jesús están tendidos, pero aquellos detrás de Él a quienes Él había tocado, están saltando de gozo y siguiéndole.  ¡Así es como Jesús sanaba a los enfermos!
Así que, esa noche, cuando Él dijo: “Tomad, comed; esto es Mi cuerpo”, mientras Él partía el pan y lo daba a Sus discípulos para que lo comieran, ellos sabían lo que esto significaba.  Ellos probablemente pensaban: “¡Vamos a ingerir Su salud en nuestros cuerpos!  ¡Aleluya!”
Eso es lo que tú debes creer cuando tomas la Santa Cena.  No se trata solo de un ritual o acto simbólico.  ¡No, debes creer que Él es el verdadero pan del cielo, que tomó tu cáncer, diabetes y enfermedad del corazón, para que tú puedas tener Su salud sobrenatural!  ¡Y cuando tú comes de Su cuerpo que es partido, con esta revelación, vas a tener vida en abundancia y la salud del Señor!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

sábado, 29 de septiembre de 2018

¿Qué Es Lo Que Ves?


Por eso os digo que todas las cosas por las que oréis y pidáis, creed que ya las habéis recibido, y os serán concedidas.
Marcos 11:24
Una señora ciega fue dirigida a un gran evangelista de sanidades para oración. Después de que él había orado por ella, le dijo: “Ahora, ¡dígame lo que ve!”  Ella abrió sus ojos pero él le dijo: “Cierre los ojos. ¡Dígame lo que ve!”  Ella abrió sus ojos nuevamente, y él le dijo: “No le he dicho que abra sus ojos. Le pregunté, ¿qué fue lo que vio? ¡Cierre sus ojos! Ahora, ¡dígame lo que ve!”
Esto se prolongó durante un tiempo, hasta que la señora se dio cuenta de que el evangelista estaba preguntándole, ¿qué era lo que había visto en su interior?  ¿Acaso ella se veía a sí misma viendo?  Cuando ella comprendió esto, le dijo: “Me veo con vista.” Entonces el evangelista le dijo: “Ahora, abre tus ojos lentamente.”  ¡En ese momento, ella abrió los ojos a una visión perfecta!
Cuando tú oraste hace un rato, ¿qué fue lo que viste en tu interior?  ¿Estabas orando por la sanidad de alguien, pero viendo a esa persona en un ataúd?  ¿Estabas orando por un rompimiento financiero, pero viendo los bancos perseguirte hasta estar en quiebra?
Verás, uno no recibe lo que pide.  Uno recibe lo que cree que recibirá cuando ora.  Jesús dijo: “Por eso os digo que todas las cosas por las que oréis y pidáis, creed que ya las habéis recibido, y os serán concedidas.”
Amado, “todas las cosas” incluye todas tus necesidades.  Y creer que las recibes viene antes de tenerlas. Una vez, Jesús le dijo un centurión: “Vete; así como has creído, te sea hecho.”  Y el criado del centurión fue sanado en esa misma hora.” (Mateo 8:13)  El centurión creyó que recibió su milagro, incluso antes de verlo en lo natural.
Así que cuando tú oras, ¿qué es lo que realmente crees y ves en el interior?
“Bueno, Pastor Prince, yo realmente no puedo ver.”
Entonces, no ores todavía.  Primero, cambia tu visión en el interior.  Comienza a verte con la respuesta.  Mírate a ti mismo sano.  Mírate a ti mismo viviendo en esa casa grande que necesitas.  Mírate a ti mismo disfrutándola totalmente.  ¡Cuando tú ya puedas ver la respuesta y creerla, entonces ora en fe y vas a tener todo lo que pidas!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

viernes, 28 de septiembre de 2018

Nada Que Hacer, Solo Creer


… “¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios?”  Respondió Jesús y les dijo: “Esta es la obra de Dios: que creáis en El que Él ha enviado.”
Juan 6:28-29
Cuando yo era un cristiano joven, asistí a un seminario sobre lo que debemos hacer para “hacer las obras de Dios”.  Me dijeron que teníamos que orar más, ayunar más, conocer a nuestro enemigo y así sucesivamente.  Salí del seminario sintiéndome confundido.  Entonces, un día, me encontré con la misma pregunta en la Biblia.  ¡Pero la respuesta fue muy diferente!
En el Evangelio de Juan, encontramos que a Jesús, una multitud que había sido asombrada por Sus milagros le hizo la misma pregunta —“¿Qué debemos hacer, para poner en práctica las obras de Dios?”  La gente había visto a Jesús sanando a los enfermos, y alimentando a 5,000 hombres con sólo cinco panes y dos peces.
Observa cómo Jesús les respondió: “Esta es la obra de Dios, que creáis en El que Él ha enviado.”  Mi amigo, la cosa más grande que podemos hacer es creer —¡cree en Jesús, el enviado, quien lo ha hecho todo por ti, en la cruz!
Si estás preguntando: “¿Qué debo hacer para recibir mi sanidad?”  La respuesta es esta: Cree en Jesús, quien  “el mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias”.  (Mateo 8:17)  Hemos visto a miembros de nuestra iglesia liberados de condiciones potencialmente mortales como el cáncer y la insuficiencia renal.  Ellos simplemente creyeron que Jesús llevaba sus enfermedades en Su propio cuerpo.  No había nada que hacer para ellos, excepto creer.
Cuando el carcelero preguntó a Pablo y Silas: “Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?” ellos dijeron: Cree en el Señor Jesús, y serás salvo, tú y toda tu casa”.  (Hechos 16: 30-31)  El milagro más grande en tu vida no pasa porque tú trabajas y tratas de salvarte a ti mismo, sino porque tú simplemente crees en Jesús, quien murió para salvarte de la condenación eterna y para darte vida eterna.  Entonces, ¿por qué los milagros menores de sanidad o rompimiento financiero serían diferentes?
Amado, ¿cuál es el milagro que tú necesitas hoy?  ¡Ya no queda nada para que tú hagas, sino todo para que tú creas, porque Jesús ya lo ha hecho todo por ti!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

jueves, 27 de septiembre de 2018

Jesús Entiende Lo Que Estás Pasando


Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado.
Hebreos 4:15
¿Alguna vez te has preguntado si Dios realmente entiende lo que es ser pobre, rechazado por la gente o enfermo con dolores y molestias?  Tal vez estás preguntando: “¿Entenderá Dios realmente esto por lo que estoy pasando?”
Mi amigo, Jesús no fue ajeno a los dolores emocionales o físicos, ni a la pobreza o las dificultades.  Él nació en una familia pobre.  Tuvo un pesebre apestoso como lugar para nacer. (Lucas 2: 7)  Desde una temprana edad, siendo carpintero, Él sabía todo acerca de trabajar duro con Sus manos, estar parado sobre Sus pies todo el día y regresar a casa con dolores en Su cuerpo.
Los líderes religiosos de Su época, hicieron la vida difícil para Él.  Ellos desafiaron Su autoridad (Mateo 21:23) y pusieron a prueba Sus enseñanzas. (Mateo 19:3)  Ellos también lo llamaron glotón, bebedor de vino, amigo de cobradores de impuestos y pecadores (Mateo 11:19), y blasfemo. (Marcos 2:7)
Ellos dijeron que Él estaba endemoniado y loco (Juan 10:20), lo hicieron el punto de referencia cuando trajeron a una mujer adúltera a Él (Juan 8:2-11), trataron de apedrearlo (Juan 8:59, 10:31-39) y lo acusaron de pervertir a la nación. (Lucas 23:2)
¿Ha sido tú expulsado ​​de tu hogar a causa de tus creencias cristianas?  Jesús comprende lo que estás pasando.  Él fue expulsado de Su propia ciudad natal. (Lucas 4:29)  ¿Has sido tú rechazado por alguien a quien amas?  Jesús también experimentó el dolor de ser negado por un ser querido (Lucas 22:54-62) y traicionado por uno a quien consideraba cercano a Él. (Lucas 22:47-48)  Él también sabe todo acerca de la enfermedad que tú estás sufriendo porque Él llevó tus enfermedades y tus dolores en la cruz. (Isaías 53:4)
Ciertamente, Jesús entiende todo lo que estamos pasando porque habiendo nacido plenamente como Hombre, Él fue “tentado en todo como nosotros”.  ¡Él soportó Sus sufrimientos a causa de nosotros, para que nosotros podamos tener Su paz y la unción para levantarnos por encima de los problemas que estamos enfrentando!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

miércoles, 26 de septiembre de 2018

Gracia Fresca Para Cada Día


Por tanto, no os preocupéis por el día de mañana; porque el día de mañana se cuidará de sí mismo.  Bástele a cada día sus propios problemas.
Mateo 6:34
“Estoy preocupado por el gran negocio que tengo que cerrar mañana.”  “Estoy preocupado por la entrevista de trabajo que tengo mañana.”  “Los resultados de mis exámenes médicos estarán listos mañana.  Tengo miedo de que no vayan a ser buenos.”
Dios no quiere que te preocupes por el mañana.  Él quiere que sepas que Él te da toda la ayuda que tú necesitas hoy, y cuando venga el mañana, también vendrá ayuda fresca de Su parte.
Este es un principio de Dios, incluso en el Antiguo Testamento.  Cuando los hijos de Israel estaban en el desierto, Dios les dio maná fresco desde el cielo, cada mañana. (Éxodo 16:13-16, 31)  Ellos no tuvieron que preocuparse por el mañana porque cuando el mañana llegaba, nuevamente había maná fresco.  Él fue su provisión cada día.
Hoy, el maná de Dios es la gracia que Él te da cada día.  Si tú estás preocupado por una situación que sucederá mañana, debes saber que habrá suficiente gracia para esa situación cuando ésta llegueDios quiere que tú simplemente descanses en Su habilidad de sanar, libertar, proteger y proveer para ti cada día.
En el Antiguo Testamento, cuando los ejércitos de Moab y de Amón vinieron en contra del Rey Josafat, Dios le dijo al ansioso rey: “No temáis, ni os acobardéis… porque la batalla no es vuestra, sino de Dios.  No necesitáis pelear en esta batalla… estad quietos, y ved la salvación del Señor…” (2 Crónicas 20:15-17)
Cuando la mañana siguiente llegó, el Rey Josafat vio como Dios causó tal confusión sobre el campamento de sus enemigos que provocó su propia masacre.  En medio de toda esa lucha en el campo enemigo, el pueblo de Dios simplemente se quedó quieto y lo vio pelear la batalla por ellos, tal como Él lo había prometido.
Mi amigo, cuando tú ves que un problema se aproxima a tu mañana, no tengas miedo, ni te desmayes.  Busca al Señor, y mira Su gracia y salvación liberarte.
Dios quiere que tú vivas una vida libre de estrés, no una vida llena de preocupaciones por los problemas de mañana.  Cuando el mañana venga, ¡Su gracia estará ahí para ti como tu ayuda, protección, favor y fortaleza!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

martes, 25 de septiembre de 2018

Dios Está En Eso Contigo


Y sabemos que para los que aman a Dios, todas las cosas cooperan para bien, esto es, para los que son llamados conforme a Su propósito.
Romanos 8:28
¿Te sientes incomprendido y abandonado por las personas que amas?  ¿Has sido acusado falsamente y se te ha despojado de todo, dejándote sin un centavo a tu nombre?  Tal vez hoy sientas que has golpeado el fondo y te preguntas si te volverás a levantar alguna vez.
José, que fue vendido a esclavitud por sus hermanos (Génesis 37:28), pasó por todas estas emociones y experiencias.  Aun así, él estaba consciente de que Dios estaba en ello con él, en cada paso del camino.  Aunque su vida era un “desastre”, él creía que no era un accidente.  Aunque las cosas que estaban sucediéndole no eran buenas, él creía que Dios estaba haciendo que todas las cosas cooperaran para su bien.  Y de hecho era así —José eventualmente fue levantado para ocupar la posición más poderosa en Egipto, la segunda, después del Faraón. (Génesis 41:40)
Probablemente, esta consciencia de que Dios estaba en ello con él, era la razón de que él perdonara a sus hermanos cuando se encontró con ellos más adelante en su vida.  José les dijo: “Ahora pues, no os entristezcáis ni os pese el haberme vendido aquí; pues para preservar vidas me envió Dios delante de vosotros”. (Génesis 45:5)
Así que, como José, cualquier cosa que estés enfrentando hoy, se consciente de que Dios está en ello contigoPermanece consciente de Jesús.  Aunque puede que no tengas nada o no mucho ahora en lo natural, ¡la verdad es que lo tienes todo cuando tienes a Jesús!
El mismo Jesús que anduvo bendiciendo a unos con 12 cestas llenas de sobras de comida, el rompimiento de una red de pesca, el hundimiento de una embarcación llena de peces, y quien nunca empobreció a nadie, va a empoderarte para que triunfes en la vida.  El mismo Jesús que anduvo haciendo el bien, hará que el bien explote en tu vida.  El mismo Jesús que anduvo sanando al enfermo y nunca le dio enfermedad a nadie, va a mantenerte en salud divina y va a protegerte del mal.
Amado, debido a que “Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos” (Hebreos 13:8), así como Él estaba con José, Él está contigo justo ahora.  ¡Y Él va a empoderarte para vivir en el nivel superior  —el de la vida abundante, en el que vas a ver las promesas de Dios manifestarse!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

lunes, 24 de septiembre de 2018

Ora Oraciones Perfectas En El Espíritu


Y Aquel que escudriña los corazones sabe cuál es el sentir del Espíritu, porque Él intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios.
Romanos 8:27
¿No te gustaría orar oraciones efectivas que estén siempre en línea con la voluntad de Dios y que siempre den en el blanco?  Bueno, cuando oras en el Espíritu,  puedes.
Verás, cuando oramos en español o en nuestra lengua materna, y de acuerdo a nuestro entendimiento limitado, podemos orar incorrectamente.  A veces, nuestra mente se interpone en el camino y nos lleva a preguntarnos: “¿No es egoísta de mi parte  orar de esta manera?”  O “¿Estré orando en línea con la voluntad de Dios?”
Mi amigo, es por eso que Dios nos da el don de la oración en lenguas.  Cuando oramos en lenguas o en el Espíritu Santo, no es posible orar fuera de la voluntad de Dios, porque el Espíritu Santo “intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios”.
En otras palabras, cuando oramos en lenguas, oramos oraciones perfectas alineadas con la voluntad de Dios.  Y la Biblia nos dice que “si pedimos cualquier cosa conforme a Su voluntad, Él nos oye.  Y si sabemos que Él nos oye en cualquier cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hemos hecho”. (1 Juan 5:14-15)
¿No es maravilloso que Dios haya puesto en ti al Espíritu Santo que ora perfectamente?  Él conoce el corazón de Dios y además  sabe exactamente lo que tú necesitas.  Y Él intercede por ti porque Él te ama mucho.
El Espíritu Santo es como tu abogado o asesor legal.  Él conoce lo que te pertenece legalmente.  Él conoce cuáles son tus derechos en Cristo (comprados con sangre).  Lo mejor de todo, ¡Él conoce exactamente cómo aplicarlos en tu vida!
Amado, cuando oras en lenguas, le permites al Espíritu Santo orar oraciones perfectas a través de ti.  Él defiende tu caso ante Dios.  Él sabe en qué cosas te has equivocado y cuál es la raíz del problema.  Además, Él tiene la sabiduría, la solución y el poder para ganar tu caso.  ¡Con el Espíritu Santo de tu lado, no puedes más que salir victorioso!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

domingo, 23 de septiembre de 2018

Bendecido Con Toda Bendición Pneumatikos


Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.
Efesios 1:3
Algunas personas piensan que el término “bendición espiritual” se refiere únicamente a las bendiciones no visibles e intangibles como la paz y la alegría.  Para ellos, la promesa de Dios de “toda bendición espiritual” excluye las bendiciones tangibles como la salud, la provisión, un matrimonio saludable, etc.  Dicen cosas como: “No esperes que Dios te quite ese tumor porque nuestras bendiciones son solamente espirituales.”
Amado, ¿sabes lo que significa la palabra “espiritual” aquí?  En el texto griego original, es pneumatikos, que en este contexto significa que tiene propiedades y características que pertenecen al Espíritu de Dios.  Así que, si por ejemplo, tú tienes la bendición pneumatikos de salud,  significa que es del Espíritu de Dios  y por lo tanto no depende del ejercicio o la dieta que tú hagas.
Un miembro de nuestra iglesia tenía la presión arterial alta y no logró normalizarla incluso después de que comenzara a hacer ejercicio y comer correctamente.  Así que, dejó de preocuparse por sus regímenes de ejercicio y dieta, y simplemente descansó en la verdad de que una presión arterial normal era una bendición pneumatikos de Dios que ya  le había sido dada.  ¡En poco tiempo, su presión arterial  bajó a un nivel saludable!
Lo mismo ocurre con la bendición pneumatikos de provisión.  Es del Espíritu de Dios, y no depende de que trabajemos siete días a la semana, ni de que sigamos de cerca la bolsa de valores.
Otra miembro de nuestra iglesia, que es dueña de una pequeña empresa, recibió su bendición pneumatikos de provisión cuando ella creyó que Dios haría que su pequeña empresa se cotizara en la bolsa.  Dios lo hizo.  De hecho, ¡la compañía recibió siete suscripciones en la primera semana!  Más tarde, incluso hizo incursiones en Oriente Medio.  Que una mujer encuentre gracia en una industria dominada por los hombres como la de ella, sólo puede ser por la bendición pneumatikos de favor, la cual no está sujeta a las leyes del hombre.
Amigo mío, cree que has recibido todas las bendiciones pneumatikos, ¡y te encontrarás disfrutando de las bendiciones que son eternas (así como Dios es eterno) y de una calidad de vida que sólo el Espíritu de Dios puede dar!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

sábado, 22 de septiembre de 2018

¿Qué Has Estado Diciendo?


La muerte y la vida están en poder de la lengua…
Proverbios 18:21
Hay muchas cosas en la vida que pueden provocarnos temor –perder nuestro trabajo, enfermedades mortales, ataques terroristas y así sucesivamente.  Cuando nos enfrentamos a estas cosas, tendemos a caer en preocupación y miedo, y comenzamos a hablar sobre esos temores.
Job no era diferente.  Él constantemente temía que Dios lo castigaría a él y a su familia porque no dejaba de pensar que sus hijos habían pecado contra Dios.  Se levantaba temprano en la mañana para ofrecer sacrificios, diciendo: “Tal vez mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en sus corazones.”  Y la Biblia nos dice que hacía esto siempre. (Job 1: 5)
Así que, Job continuó confesando los pecados de sus hijos y temiendo que algo terrible les sucedería a él y a su familia.  De hecho, esta conciencia de pecado no sólo le produjo temor, la Biblia nos dice que estaba aterrorizado. (Job 3:25)
Es importante que entendamos que fue la conciencia de pecado de Job lo que le abrió la puerta a Satanás.  Su preocupación por los pecados que su familia pudo haber cometido dio a Satanás la oportunidad de llevar muerte y destrucción a su vida.  Dios tenía un cerco de protección alrededor de Job.  Pero cuando él comenzó a ser consciente de pecado y tener una temerosa expectativa de juicio, el cerco fue removido y Satanás pudo atacarlo. (Job 1: 9-12)
Amigo, si has pecado, no digas: “He fallado de nuevo.  Merezco ser castigado por Dios.”  ¡Recuerda que tus pecados ya han sido perdonados porque Jesús fue castigado y condenado en tu lugar!  (Efesios 1: 7)  Así que di: “Yo soy la justicia de Dios en Cristo.  Gracias Jesús, porque Tú eres mi santidad y mi perfección.” (1 Corintios 1:30; 2 Corintios 5:21)
Debemos ser conscientes de lo que creemos y decimos regularmente porque “la muerte y la vida están en poder de la lengua.”  Así que, cuando oigas hablar de un virus mortal que ha tomado muchas vidas, no digas: “¡Yo seré el próximo porque no he sido un buen cristiano!”  En cambio, di: “Jesús, Tú eres mi justicia y protección. Ciertamente me librarás del lazo del cazador, de la peste destructora.” (Salmo 91: 3)
Amado, creer y confesar de esta manera,  no sólo agrada a Dios, ¡sino que también cierra la puerta a Satanás para que él no pueda obrar en tu vida!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

viernes, 21 de septiembre de 2018

Es Fácil Tomar De Dios


Y he descendido para librarlos de mano de los egipcios, y para sacarlos de aquella tierra a una tierra buena y espaciosa…
Éxodo 3:8
Cuando los hijos de Israel se proveían para sí mismos en Egipto, comían pepinos, melones, puerros, cebollas y ajos. (Números 11:5)  Este tipo de alimentos requería que ellos se agacharan casi hasta el suelo para arrancarlos y poder comerlos, un trabajo agotador. 
Pero cuando Dios proveyó para ellos en Canaán, una tierra que mana leche y miel (Números 13:27), Él les dio uvas, granadas e higos. (Números 13:23)  Estas frutas no se dan en el suelo así que los israelitas sólo tenían que estirar su mano para tomarlas y comerlas.
Dios quiere que sepas que cuando Él provee para ti, podrás ver un flujo de provisión viniendo hacia ti, ¡y todo lo que necesitas hacer es simplemente estirar tu mano y tomar de Él!
Así que, si estás pensando en casarte, no te digas: “Bueno, si trabajo duro y empiezo a ahorrar ahora, tendré...  ¡Oh Dios, no es mucho!  El costo del banquete de bodas acabará con todo.  ¿Cómo puedo casarme?”
Como hijo de Dios, debes saber que tu papá Dios está muy entusiasmado con tu próxima boda, ¡y Él es muy rico!  No he visto parejas en nuestra iglesia con escasez en el día de su boda.  Lo que he visto es dinero entrando en el mismo día de la boda.  Y para cuando la celebración ha terminado, todo está pagado.  Así que, en lugar de confiar en tus esfuerzos para tener lo suficiente para tu gran día, Dios quiere que fijes la fecha de tu boda y pongas tu confianza en que Él proveerá abundantemente.
¿Te enfrentas a una deuda financiera?  ¿Cuánto crees que puede ahorrar al trabajar horas extras y tomar un segundo empleo?  Algunos miembros de nuestra iglesia pueden testificar que Dios simplemente cambió sus situaciones financieras totalmente.  De hecho, el pastor Mark, nuestro pastor para los servicios hokkien y mandarín, tenía una deuda considerable antes de convertirse al cristianismo.  Después de ser salvo, él puso su deuda en manos de Dios.  ¡En  dos años, su deuda fue sobrenaturalmente limpiada e incluso tenía un superávit!
Amigo, la fe es la mano que toma de Dios¡Y que fácil es tomar de Dios!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

jueves, 20 de septiembre de 2018

Dios Puede Calificar Lo Descalificado


El que rescata de la fosa tu vida, El que te corona de bondad y compasión.
Salmos 103:4
En la genealogía de Jesús son mencionadas cuatro mujeres. (Mateo 1:1-16).  Interesantemente, ellas no son Sara, Rebeca, Lea o Raquel, las esposas de los patriarcas del Antiguo Testamento.  En su lugar están: Tamar, Rahab, Rut y Betsabé, mujeres con un pasado de moral cuestionable.
Tamar recurrió al engaño y la prostitución para engendrar un hijo por medio de su suegro.  Aun así, fue de su linaje, de la tribu de Judá, que el Mesías vino. (Génesis 38)  Rahab era una gentil y una prostituta en Jericó, que se convirtió en una creyente del Dios de Abraham, Isaac y Jacob. (Josué 2:1-21)  Ella también se convirtió en la madre de Booz, quien desposó a Rut. (Rut 4:13)
Rut era recta moralmente.  Pero como Moabita, ella era una gentil y por lo tanto, era considerada impía.  Aun así, ella se convirtió en la abuela de David  (Rut 4:13-17), a quien los judíos se refieren como su más grande rey.  Betsabé cometió adulterio con David. (2 Samuel 11:4)  Luego, trajo al mundo al Rey Salomón (2 Samuel 2:24), de cuyo linaje real desciende Jesús.
¿Entonces qué nos está diciendo Dios aquí?
Él está diciendo que Él es más grande que nuestros pecados —en donde abunda el pecado, Su gracia sobreabunda. (Romanos 5:20)  Su gracia es mayor que nuestros pecados, así que incluso cuando el mundo nos descalifique, ¡Él puede calificarnos para recibir Sus bendiciones!
Dios también está diciendo que Él es un Dios de muchas oportunidades.  Las historias de esas mujeres nos muestran que incluso, aunque nuestros problemas son de nuestra propia hechura, éstos no son definitivos, ni mortales¡Cuando nos volvemos hacia Él, Él cambia totalmente nuestras situaciones, hasta que podamos ver Su gloria sobre nosotros!
Finalmente, Dios está diciendo que Él es un Dios de posicionamiento sobrenatural.  Incluso cuando todas nuestras conexiones terrenales se acaban, en el momento en que nos volvemos a Él, Él encuentra la manera de convertir nuestra cautividad en bendiciones.
Mi amigo, no mires tus circunstancias naturales y te desanimes.  Confía en Aquel “que rescata de la fosa tu vida y te corona de bondad y compasión”.  ¡Confía en Aquel, que califica lo descalificado!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

miércoles, 19 de septiembre de 2018

No Vivas Enfocado En El Juicio


… Dios estaba en Cristo reconciliando al mundo Consigo Mismo, no tomando en cuenta a los hombres sus transgresiones…
2 Corintios 5:19
¿En qué dos ciudades antiguas hizo Dios llover azufre y fuego?  Si respondes que son Sodoma y Gomorra, estás en lo cierto.  Pero si estás pensando que Dios estaba más que deseoso por destruir estas dos ciudades, ¡estás equivocado!
Dios no estaba esperando hacerlo.  Él no andaba a la caza de pecado.  Él andaba a la caza de justicia, para así poder salvar las ciudades. (Génesis 18:23-32)  Yo creo que si Abraham le hubiera preguntado a Dios: “¿Y si solamente encontraras a un hombre justo?”  La respuesta de Dios habría sido la misma: “Yo no la destruiré por consideración a la vida de un hombre justo.”
Hoy, la justicia de un Hombre —Jesús— ha venido.  Jesús murió por nuestros pecados y resucitó por nuestra justificación.  Dios estaba en Cristo, reconciliando al mundo Consigo Mismo, ¡Él no estaba contando nuestros pecados en contra nuestra!
De manera que ningún juicio caerá sobre ti hoy, porque cayó en Jesús hace 2,000 años en el Calvario.  Y si Dios tuvo la suficiente gracia para sacar a Lot y a su familia antes de que cayera el juicio (Génesis 19:12-22), ¡cuánto más hará Él por ti, que ya no estás más bajo juicio!
Y ya que Dios no te juzga, no seas como la esposa de Lot, quien se convirtió en una estatua de sal cuando se volvió para ver la lluvia de azufre y fuego. (Génesis 19:24-26)  Ella quería ver el juicio de Dios, incluso cuando los ángeles le habían advertido: “No mires detrás de ti, no sea que seas destruido.” (Génesis 19:17)
Así que, no vivas enfocado en el juicio, ni voltees a ver detrás de ti a los pecados que has cometido.  Dios no está en tu contra.  Él está por ti y está de tu lado.  Te recuerda que Él ya ha juzgado y castigado tus pecados en el cuerpo de Su Hijo.  Y debido a que Él es fiel a Su Hijo, y a lo que Su Hijo ha hecho, Él nunca va a juzgarte, ni castigarte.  Cualquier problema que estés enfrentando hoy no viene de Él.  Pero Él va a mostrarte un camino de salida, porque Él está de tu ladoÉl te ama y en Su corazón están tus mejores intereses.
Amado, Dios no anda afuera para atraparte.  Él anda afuera para bendecirte.  ¡Y Él te quiere más bendecido de lo que tú puedas pedir o imaginar! (Efesios 3:20)
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

martes, 18 de septiembre de 2018

Dios Que Justifica Al Impío

Mas al que no trabaja, pero cree en Aquel que justifica al impío, su fe se le cuenta por justicia.
Romanos 4:5
Confianza es lo que Dios quiere que tú tengas cuando te acercas a Él.  Él no quiere que tú tengas temor de acercarte a Él porque te sientes indigno a causa de tus pecados.  Él quiere que tú te acerques confiadamente a Él, sabiendo que la muerte, sepultura y resurrección de Su Hijo Jesucristo te ha justificado y te ha calificado para que recibas de Él confiadamente.
Ésta fue la clase de confianza que la mujer con el flujo de sangre tuvo cuando tocó a Jesús. (Marcos 5:25-34)  Ahora, ella sabía que al tocar a Jesús estaba rompiendo la ley Levítica que establecía que cualquiera que tuviera flujo de su cuerpo era inmundo y no debería aparecer en público, mucho menos tocar a otra persona. (Levítico 15)
Pero ella se rehusó a sentirse condenada por la ley.  Ella creyó lo que había escuchado acerca de Jesús, y tuvo la confianza de que solo encontraría amor y compasión en Él, no condenación.  Ella creyó que Jesús la justificaría y la calificaría para recibir el milagro que necesitaba.  Fue por eso que ella se  introdujo con confianza entre la multitud para tocar a Jesús, quien ciertamente le dijo: “Hija, tu fe te ha sanado”. (Marcos 5:34)
¿Qué fue eso acerca de su fe que la hizo ser sana?  Romanos 4:5 habla acerca de la fe que cree que Dios justifica al impíoCuando creemos que Dios justifica al impío, eso nos da la confianza para acercarnos a Dios, incluso cuando nos sentimos impuros porque acabamos de arruinarlo todo.
Cuando falles, no corras lejos de Dios.  Corre con confianza hacia Él, sabiendo que tú eres justificado por la sangre de Cristo y no por tu buen comportamiento.
El diablo puede decirte: “¿Cómo pudiste hacer eso?  ¿Quién te crees que eres?”  Tú no lo escuches.  Levántate y dale gracias a Dios por la sangre y el regalo de no condenación. (Romanos 8:1)  Si Dios justifica al impío, ¿cuánto más a ti, Su amado hijo?
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

lunes, 17 de septiembre de 2018

Descansa Y Halla La Gracia De Dios


Y el Niño crecía y se fortalecía, llenándose de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre El.
Lucas 2:40
El versículo dice que la gracia de Dios estaba sobre Jesús.  La Biblia también dice que donde el pecado abundó, sobreabundó la gracia. (Romanos 5:20)  Y cuando pones estas dos verdades juntas, resultas preguntándote: “¿Si la gracia de Dios estaba sobre Jesús, significa que Él pecó?
No, Jesús no pecó. (2 Corintios 5:21)  Así que, debe haber otra explicación de por qué la gracia de Dios estaba sobre Jesús.  Debe haber otra explicación de por qué alguien puede abundar en la gracia de Dios incluso cuando no ha pecado.
Veamos la palabra “gracia” cuando esta es mencionada por primera vez en la Biblia.  Génesis 6:8 dice que “Noé halló gracia ante los ojos del Señor.”  El nombre Noé significa “descanso”.  Así que, el versículo nos está diciendo que el descanso halla gracia.  En otras palabras: ¡cuando tú descansas, tú hallas gracia!
Así que, la gracia estaba sobre Jesús porque Su vida era una vida de descanso y confianza en Su Padre.  Él dijo: “El Hijo no puede hacer nada por Su cuenta, sino lo que ve hacer al Padre”. (Juan 5:19)
De igual manera, la gracia viene sobre ti cuando tú descansas y confías en Dios.  Si tienes un hijo caprichoso, deja de regañarlo y confía en que Dios se haga cargo del problema.  Di: “Jesús, yo encomiendo a este niño en Tus manos.  Yo no puedo controlarlo.  Tú si puedes.”  Si tienes un dolor persistente en tu cuerpo, entrégaselo al Señor diciendo: “Jesús, yo entrego todas mis preocupaciones acerca de este dolor a Ti.  Opera Tú en este dolor.”
“Pastor Prince, ¿qué hago si nada sucede?”
Honestamente, si después de que has entregado el asunto a Jesús nada sucede, ¿qué podrías hacer?  Si Jesús Mismo no puede hacer nada al respecto, ¿piensas que tú podrías?  Pero alaba a Dios porque una vez que el problema ha sido entregado a Jesús, ¡Él puede y hará una obra perfecta, haciéndose cargo de éste por ti!
Así que, vive una vida de descanso.  Mantén esta actitud y dile al Señor: “Yo no puedo hacer nada por mí mismo.  Yo solo puedo descansar en Ti Señor y Yo confío en Ti.”  Amado, lo que vas a ver es la gracia de Dios sobre ti en cada situación de tu vida.
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince