recibe pequeños mensajes de gracia todos los días

sábado, 31 de octubre de 2020

Cuan Tierno Es El Corazón De Dios Hacia Ti

 Inspiración de Gracia

A fin de poder mostrar en los siglos venideros las sobreabundantes riquezas de Su gracia por Su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.  (Efesios 2:7)

¿Alguna vez has sacado las cosas de proporción y te has enojado con Dios mientras pasabas por un momento difícil?  Esto les sucedió a los discípulos de Jesús cuando una tormenta los golpeó con fuerza.  En su temor de ahogarse, ellos le gritaron a Jesús, quien estaba tomando una siesta bien merecida en la barca, “Maestro, ¿no te importa que perezcamos?” (Marcos 4:38)

Por acusarlo a Él de que no le importa, podrías pensar que ellos recibieron una reprimenda de Jesús.  Pero fue el viento el que recibió Su reprensión, y sobrevino una gran calma. (Ver Marcos 4:39)  Debido a Su ternura para con los Suyos, Jesús no perdió el tiempo ofendiéndose.  Él en cambio, no perdió tiempo para hacerse cargo del problema que había provocados mucha ansiedad y temor en Sus discípulos.

Esto también les pasó a dos hermanas, Marta y María, quienes no dudaron en hacerle saber a Jesús cómo se sintieron cuando Él finalmente apareció días después de que su hermano Lázaro había muerto.  Ambas hermanas le hicieron el mismo comentario: “Señor, si Tú hubieras estado aquí, mi hermano no habría muerto.” (Juan 11:21, 32)

Ambas hermanas habían visto los milagros de misericordia y amor de Jesús.  Ahora, en su dolor, ellas se concentraron en cómo Él pudo haber evitado la muerte de su hermano, pero no lo hizo.  Ellas no conocían Su corazón —cuán tierno era hacia ellos y cómo Su ayuda nunca les fallaría, sino que incluso se extendería para resucitar a su hermano muerto. (Ver Juan 11:41–44)

Amado, tu Padre celestial te ve tratando de mantenerte a flote cuando estás en medio de una tormenta.  Él te ve tratando de proveer para ti mismo y para tu familia, y piensas: “¡Si yo no me ocupo de estas cosas, nadie más lo hará!”  Y Él quiere que tú sepas cuán tierno es Su corazón hacia ti, cómo Él no se ofende por todas las cosas malas que alguna vez tú has dicho de Él o a Él.  Él quiere que tú sepas cuánto Él quiere y va a ayudarte y a bendecirte.  ¡Así que déjate llevar y experimenta de nuevo las abundantes riquezas de Su gracia en Su bondad hacia ti!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

viernes, 30 de octubre de 2020

Él También Es El Dios De Tus Valles

Inspiración de Gracia

Y los siervos del rey de Aram le dijeron: Sus dioses son dioses de los montes, por eso fueron más fuertes que nosotros; mejor peleemos contra ellos en la llanura, pues ¿no seremos más fuertes que ellos?  (1 Reyes 20:23)

En 1 Reyes 20, encontramos a los sirios siendo derrotados por los israelitas.  Luego, algunos de los consejeros del rey sirio le dijeron al rey lo que pensaban que era el motivo de su derrota.  Dijeron que ellos habían peleado en los montes y habían perdido porque el Dios de Israel es el Dios de los montes.  Así que,  si ellos salieran  pelear contra los israelitas en la llanura o el valle, ellos ganarían.

¡Qué consejo tan tonto!  Ellos pensaban que el Dios de Israel solo ayudaba a Su pueblo arriba en las colinas y montañas, y no abajo en los valles.

Ahora, las montañas se refieren a nuestros buenos tiempos y los valles a nuestros malos tiempos.  Algunas personas tienen la idea de que Dios es el Dios de nuestros buenos tiempos, pero Él no está allí cuando nosotros estamos pasando malos tiempos.  Ellos piensan que Él nos deja indefensos en los valles, especialmente cuando los problemas los creamos nosotros mismos.

Amigo, quiero que sepas que nuestro Dios es el Dios de las montañas, ¡pero Él también es el Dios de los valles!

Dios el Hijo dejó a un lado Su corona de gloria, Su majestad real y descendió por nosotros, entrando en un cuerpo humano como bebé.  Él bajó a donde nosotros estábamos con el único propósito de morir en la cruz por nuestros pecados, para poder llevarnos hacia arriba, a lo que Dios el Padre tiene para nosotros a Su diestra.  Jesús bajó para coronarnos con gloria y honor, para vestirnos con ropas de justicia y hacernos Su esposa, compartiendo con nosotros todo lo que Él tiene.  Esa es la gracia de Dios.  Él bajó a nuestro valle.

Así que, sea lo que sea por lo que estás pasando ahora, recuerda que Dios está allí mismo, contigo, en tu valle.  Él te está sosteniendo en Sus brazos y te carga para atravesar ese valle.  La victoria ya es tuya.  Así como los israelitas salieron también victoriosos en el valle (ver 1 Reyes 20:28-29), ¡tú también lo harás, porque el Dios de los valles está allí contigo!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

jueves, 29 de octubre de 2020

Vestido Con La Túnica De Justicia De Jesús

 
Inspiración de Gracia

Después desollará el holocausto y lo cortará en pedazos.  (Levítico 1:6)

¿Sabes quién vistió por primera vez al hombre con túnicas de piel?  Fue el Dios Todopoderoso Mismo, cuando encontró a Adán y Eva escondiéndose detrás de los arbustos porque le tenían miedo.  Ellos se habían vuelto temerosos y conscientes de que habían pecado contra Dios.  En su conciencia de pecado, ellos se dieron cuenta de que estaban desnudos y que la gloria de Dios, que había sido su cobertura, se había ido.

Así que Dios mató un animal para vestir a Adán y Eva con túnicas de piel. (Ver Génesis 3:21)  Un animal tuvo que morir y su piel ensangrentada se convirtió en su cobertura.  Esto habla de la sangre de Jesús que te cubrió cuando Él se convirtió en tu holocausto.  El Cordero de Dios no solo quitó tus pecados.  Él también te dio Su justicia.

Amado, tú estás cubierto por la sangre de Jesús.  Tú eres justo por Su sangre.  Dios te ha vestido con el manto de justicia, que fue pagado con la sangre de Jesús.  Yo no estoy hablando de un manto físico hecho de tela.  Me refiero al manto de justicia que Jesús llevaba cuando le dijo a la tormenta: “¡Calma, enmudece!” y vino una calma perfecta (ver Mateo 8:23–27), cuando la sanidad fluyó de Él hacia los enfermos y cuando Él resucitó a Lázaro de los muertos (ver Juan 11:38–44).

Cuando tú crees que eres justo debido a la sangre de Jesús, ves los efectos de usar Su manto de justicia.  Vas a ver milagros sucediendo ante tus propios ojos.  Te conviertes en un imán de bendiciones, un imán de favor o gracia.  No se trata de tu propia justicia, sino de la justicia de Jesús que te has puesto encima, lo que atrae todas estas bendiciones de Dios a tu vida.

Amigo, ten la conciencia de estar vestido con el manto de justicia de Jesús.  Todos los días, acércate a Dios y di: “Padre, yo te doy gracias porque Jesús es mi holocausto.  Él me cubre de la cabeza a los pies con Su justicia.  Lo que Él es para ti, yo soy.  Como Él es ahora, así soy yo.  Yo estoy en Él.”  ¡Y vas a ver las manifestaciones de las bendiciones de salud, plenitud, protección y provisión que a túnica atrae!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

miércoles, 28 de octubre de 2020

Bendecido En Más De Una Forma

 Inspiración de Gracia

Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.  (Romanos 5:1)

Nosotros no estamos tratando de conseguir la paz con Dios.  Nosotros ya tenemos paz con Dios, habiendo sido justificados por la fe por medio de nuestro Señor Jesucristo.  Esta paz con Dios nos da la paz de Dios, que guarda nuestros corazones y nuestras mentes. (Ver Filipenses 4:7)  Entonces, la paz de Dios dentro de nosotros también se traducirá en la paz de Dios fuera de nosotros —en todas nuestras circunstancias externas.

En primer lugar, descubriremos que lo que normalmente nos causaría mucha preocupación y ansiedad, ya no lo hará.  En segundo lugar, no solo todo saldrá bien, sino que también seremos bendecidos en más de una forma.  Esto es lo que sucede cuando Jesús, el Príncipe de la Paz, es nuestra paz.

Una miembro de la iglesia, aunque enferma de cáncer, disfrutaba de la paz de Dios, sabiendo que Él era su sanador.  Más tarde ella recibió la confirmación de dos médicos diferentes de que había sido completamente sanada del cáncer.  Además de recibir su bendición de sanidad completa, ¡ella también recibió de su compañía de seguros el pago de S$50,000 de su reclamo por enfermedad crítica!

Otra miembro de la iglesia, al escuchar la noticia de su despido a causa reducciones necesarias en su empresa, le confió el asunto a Dios, creyendo que Él haría que todas las cosas cooperaran para su bien, especialmente su pérdida de un ingreso fijo.  Poco tiempo después, ella recibió su paquete de indemnización —una suma sustancial de cinco cifras.  Y a los pocos días de su despido, ella recibió llamadas de sus contactos en la industria, ofreciéndole trabajos, dos de los cuales eran trabajos en reconocidas corporaciones multinacionales (CM).

En ese momento, ella aún no había comenzado a buscar trabajo, así que las llamadas fueron inesperadas pero bienvenidas.  Ella finalmente optó por trabajar para una de las multinacionales —un sueño hecho realidad para ella— ¡con un salario un 30 por ciento mayor que el anterior!  Cuando ella simplemente oró: “Abba Padre, yo confío en que Tú me cuidarás” y descansó en Su amor y Su paz, ella fue abundantemente bendecida.

Amado, debido a que Jesús es tu paz, tú eres bendecido en más de una forma.  Tu alma prosperará.  Tu salud prosperará.  Tus finanzas prosperarán.  Tus seres queridos estarán cuidados.  Tus relaciones florecerán.  Tú disfrutarás del favor de Dios.  ¡Todo porque tienes al Príncipe de Paz!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

martes, 27 de octubre de 2020

La Vida De Jesús Está En Ti

 Inspiración de Gracia

… Yo [Jesús] he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.  (Juan 10:10)

Aunque Jesús es completamente Dios, Él nació completamente humano.  Pasó por tentación tras tentación y venció cada una de ellas. (Ver Hebreos 4:15)  Y todo ese poder vencedor se encuentra en Su vida.  Y Él puso esa vida en ti —¡la vida de Cristo está en ti!

Durante el ministerio de Jesús en la tierra, Él venció la enfermedad, los vientos y las olas, los poderes de las tinieblas y la muerte.  Es Su vida la que da la victoria sobre el diablo y todas sus obras.  Y Él puso esa vida en ti —¡la vida de Cristo está en ti!

Finalmente, Jesús fue a la cruz.  Y esa vida en Él le puso fin a todo lo que era natural en la raza Adámica —enfermedad, pobreza, fracasos, dolores, maldiciones y muerte. Todo lo que era natural dejó de serlo en esa vida Suya.  Pero todo lo que era sobrenatural permaneció en Él.  Y Él puso esa vida en ti —¡la vida de Cristo está en ti!

Luego, Jesús resucitó de entre los muertos.  Y a esa vida Suya se le añadió el poder de la resurrección.  Y Él puso esa vida en ti —¡la vida de Cristo está en ti!

Después de Su resurrección, Jesús regresó al cielo con Su Padre.  Hoy, Él está sentado a la diestra de Dios, descansando en Su obra terminada, ocupando el lugar de más alta autoridad.  Y Él puso esa vida en ti —¡la vida de Cristo está en ti!

Y debido a que Jesús regresó al Padre, el Espíritu Santo vino a morar en ti (ver Juan 16:7), para que tú vivas la vida con Su unción en ti y camines en Su poder vencedor.

Todo lo que Jesús es, Dios quiso que tú lo seas.  Todo lo que Él tiene, Dios quiso que usted lo tengas.  Todas las cosas emocionantes que lees en la Biblia acerca de Jesús, todos los tesoros escondidos acerca de Él en el Antiguo Testamento y las inescrutables riquezas en Él que encontramos en el Nuevo Testamento, toda esa vida Suya, no está por ahí.  ¡Dios ha depositado todo de esa vida en ti, para que tú puedas vivir la vida abundante que Jesús vino a darte!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

lunes, 26 de octubre de 2020

Perdona Y Deja Que Dios Haga El Resto

 Inspiración de Gracia

Sed más bien amables unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, así como también Dios os perdonó en Cristo.  (Efesios 4:32)

A la gente le gusta decir: “Yo puedo perdonar, pero nunca olvidar.”  ¿Habías oído esto antes?  Ahora, en primer lugar, en ninguna parte de la Biblia Dios te dice que perdones y luego olvides.  ¡Eso no está en la Biblia!  El diablo está agregando algo aquí para hacer que esto te resulte una carga.

Dios solo nos dice que perdonemos porque Dios en Cristo nos ha perdonado una deuda que no podíamos pagar.  ¡Cuando hacemos esto, nos hacemos un favor porque albergar amargura y falta de perdón puede destruir nuestra salud algunas veces!

Así que solo perdona y deja que Dios se encargue del resto.  Cuando tú realmente perdonas, algunas veces, Él te hace olvidar.  Pero otras veces, tú aún recuerdas el incidente porque este fue algo importante en tu vida.  Sin embargo, cuando miras hacia atrás, el dolor ya no existe.  El aguijón se ha ido y tú no estás amargado.

José había perdonado a sus hermanos antes de que ellos vinieran y se inclinaran ante él.  Él recordaba lo que ellos le hicieron, pero no lo recordaba con amargura. (Ver Génesis 50:15-21)  De modo que tú puedes recordar el incidente, pero la amargura se ha ido porque has puesto la cruz en el cuadro —“Dios me perdonó en Cristo.  Papá, te perdono.  Mamá, te perdono.  Prima, te perdono.”

Cuando perdones, perdona por fe, no por tus sentimientos.  Nosotros caminamos por fe, no por sentimientos. (Ver 2 Corintios 5:7)  Algunas personas están esperando los sentimientos: —“Estoy esperando, Padre, que la emoción correcta venga sobre mí para perdonar a esa persona.”  ¡Esa “emoción correcta” puede nunca llegar!

No, perdona por fe y hazlo una vez y para siempre.  Pasa tiempo en oración.  Saca tu diario y anótalo: “Padre, traigo a esta persona delante de ti.  Tú sabes lo que me hizo.  Padre, como Tú me perdonaste a mí por medio de la cruz de Jesús, aunque yo no lo merecía, por fe, yo ahora perdono a esta persona y dejo que mi ira contra él/ella se vaya en el nombre de Jesús.  ¡Amén!"

Una vez que tú perdones por fe, vas a ver que el aguijón de la amargura es removido de tu corazón.  ¡Vas a experimentar la paz y el gozo de Dios llenando tu mente y verás una mayor medida de plenitud en tu cuerpo!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

domingo, 25 de octubre de 2020

Fiel A Tu Valuación

Inspiración de Gracia

Y el sacerdote lo valuará como bueno o como malo; como tú, el sacerdote, lo valúes, así será.  (Levítico 27:12)

Tu colega dice que esta semana va a ser terrible porque el nuevo jefe es un malvado.  Tú no estás de acuerdo y dices que esta será una semana bendecida.  Los dos pasarán por la misma semana, pero con resultados muy diferentes.  Si bien la semana de tu amigo será realmente terrible, ¡la tuya estará llena del favor del Señor!

En el Antiguo Testamento, cuando alguien traía lo que tenía al sacerdote para que lo valuara, cualquiera que fuera el valor que el sacerdote determinaba, ese era.  Si él  consideraba que era de buen valor, entonces era de buen valor.  Si lo valuaba como de bajo valor, entonces era de bajo valor.

Hoy, tú también eres sacerdote debido a la sangre de Jesús. (Ver Apocalipsis 1:5–6)  Y “como tú, el sacerdote, lo valúes, así será.”  Si tú valúas tu año como un año de grandes rompimientos financieros, así será para ti.  Si valúas que tu vida estará llena de salud divina, así será para ti.

Había un paciente de un accidente cerebrovascular que estaba postrado en cama.  Mientras escuchaba mis sermones grabados, él valuó que con Dios como su salvación, su vida sería larga y satisfactoria. (Ver Salmo 91:16)  Él creía que Dios lo ayudaría a caminar de nuevo.  No mucho tiempo después de su valuación, ¡él pudo caminar y ya no estaba atado a la cama!  La siguiente valuación que él hizo sobre su salud fue la recuperación completa con Dios como su ayudador.

De hecho, tú tienes más autoridad que los sacerdotes levitas del Antiguo Testamento.  Ellos pertenecían al antiguo sacerdocio de los hombres mortales.  ¡Pero tú perteneces sacerdocio de Jesús que es mayor y e “para siempre.” (Ver Hebreos 7:8,17)  Y no solo eso, tú eres un rey-sacerdote. (Ver Apocalipsis 1:6)  En otras palabras, ¡tú también eres un rey!  Y como rey, tu valuación también es vinculante porque donde está la palabra de un rey, ¡hay poder! (Ver Eclesiastés 8:22)

Amigo, esto significa que tú tienes una doble porción del poder de valuación.  Por lo tanto, valúa con confianza las cosas buenas para su vida, ¡y así será para usted!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

sábado, 24 de octubre de 2020

¡Dios Ha Visto Tu Futuro Y Es Bueno!

 Inspiración de Gracia

“Ensancha el lugar de tu tienda, extiende las cortinas de tus moradas, no escatimes; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas.”  (Isaías 54:2)

A finales de 2004, durante uno de nuestros servicios, el Señor le dijo a nuestra iglesia esto: “Yo, tu Dios, he ido delante de ti y ya he estado en tu futuro.  Lo he visto.  Y declaro que es bueno.”

Aunque esta palabra fue dada a través de mí a nuestra iglesia, yo creo que esta no es solo para nuestra iglesia, sino también para cada miembro del cuerpo de Cristo.

Déjame decirte que cuando Dios declara que tu futuro es bueno, ¡éste será bueno!  ¡Estará lleno de muchos días maravillosos!

Entonces, ¿qué hacemos cuando el Señor nos dice que tendremos un buen futuro cargado de Sus bendiciones?  ¡Nos preparamos para ello!  En otras palabras, antes de que las bendiciones vengan, antes de que el aumento venga, Él quiere que tú ensanches el lugar de tu tienda y extiendas las cortinas de tus moradas.

Por ejemplo, si tú estás esperando en Dios por un hijo, comienza a leer libros sobre bebés y a preparar la habitación para tu bebé.  De hecho, prepárate para tener más de un hijo.  Comienza a buscar un lugar más grande para tu familia porque Dios dice: “Ensancha el lugar de tu tienda, y extiende las cortinas de tus moradas, no escatimes; alarga tus cuerdas, y fortalece tus estacas.”  ¡Prepárate para el crecimiento!

Amigo, Dios quiere que te prepares y que esperes tal favor y crecimiento en los días venideros que “te extenderás hacia la derecha y hacia la izquierda; tu descendencia poseerá naciones y poblarán ciudades desoladas.” (Isaías 54: 3)

Debido a que Dios ha declarado que tu futuro es bueno, recuerda que tú estás hoy en un terreno favorable.  Espera que te sucedan cosas buenas.  Espera ver el favor de Dios sobre ti y tu familia.  Espera las bendiciones y el crecimiento del Señor.  ¡Espera que muchos días buenos vengan a tu vida!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

viernes, 23 de octubre de 2020

Mírate En Cristo

 Inspiración de Gracia

Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.  (Efesios 1:3)

Recuerdo haber pasado por un momento terrible de depresión cuando tenía 18 años.  Creyendo estar poseído por un demonio, yo busqué a un gran hombre de Dios para que echara al diablo fuera de mí.  Pero cuando este hombre de Dios impuso manos en mí, comenzó a profetizar sobre mí.  Él dijo: “Joe, yo te veo predicando a miles y ser usado por Dios para impactar miles de vidas.  Joe, tú has sido llamado por Dios y el diablo está tratando de detenerte.”

“¿Qué?  ¡Yo vine aquí para ser liberado!  Yo solo estoy interesado en  salvar mi propia vida, no en predicar ni impactar vidas,” pensé para mis adentros en ese momento.

Verás, lo que sucedió fue que en ese momento, Dios permitió que este hombre entrara en la zona atemporal en la que Él existe para traer mi futuro ante mí.  En lo que respecta a Dios, mi futuro ya había sucedido, aunque yo solo tenía 18 años entonces.  Hoy, yo soy pastor de una iglesia que tiene más de 30,000 miembros.  Hoy, yo estoy viendo lo que me dijeron hace mucho tiempo.

Dios no ve como nosotros vemos.  Abraham era un hombre de 100 años, que no tenía hijos.  Su esposa, Sara, a los 90 años, estaba doblemente muerta en su vientre (ver Génesis 17:17).  Sin embargo, Dios lo vio y habló con él como si él ya fuera el padre de muchas naciones.

Amigo, Dios quiere que tú veas de la manera como Él ve.  En este momento, tú puedes verte atravesando una prueba en tu matrimonio, en tu trabajo, en tus finanzas o en tu salud.  Pero Dios ve un matrimonio bendecido, te ve exitoso en el trabajo, ve provisión sobrenatural y un cuerpo sano porque Él te dice que tú ya has sido bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo.

Ves, Dios te ve en Cristo.  Entonces, cuando tú te ves a ti mismo en Cristo, que está fuera del tiempo, tú entras en la zona atemporal.  En esa zona atemporal en Cristo, ¡cualquier necesidad y prueba tuya ya ha sido eliminada, reparada, restaurada o resucitada!  En esa zona atemporal en Cristo, ¡tú ya has sido bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

jueves, 22 de octubre de 2020

Que No Se Turbe Tu Corazón

 Inspiración de Gracia

La paz os dejo, Mi paz os doy... No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.  (Juan 14:27)

La noche antes de que Jesús muriera, Él les dio Su paz a Sus discípulos —“La paz os dejo, Mi paz os doy…”  Esta paz no era solo para Sus discípulos, sino también para nosotros hoy.  Nosotros tenemos Su paz.

En el momento en que tú crees en Jesucristo, Él que es el Príncipe de Paz viene a vivir dentro de ti.  Y cuando el Príncipe de Paz reside en ti, cada bendición que tú puedas necesitar en relación a tu estabilidad y plenitud, ya está dentro de ti.

“Pastor Prince, si esto es verdad, entonces ¿por qué yo sigo viendo problemas en mi salud, finanzas, familia y relaciones?”

La respuesta es un corazón atribulado.  Es por eso que después de que Jesús dijo: “La paz os dejo,” Él dijo: “No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”

Un corazón angustiado y temeroso funciona como dedos que sujetan con fuerza una manguera de agua.  La corriente de agua está fluyendo del grifo, pero poco o nada sale por el otro extremo de la manguera.  La siempre presente provisión de bendiciones de Dios hacia ti es como el agua que fluye del grifo libremente.  Pero tú  no ves las bendiciones cuando le permites a tu corazón agarrarse de la preocupación o el miedo.

Así que cuando surjan pensamientos de ansiedad y temor, recuérdate a ti mismo las palabras de Jesús: “No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.”  Incluso cuando las cosas parezcan empeorar, di: “Señor, yo  me niego a preocuparme por esto.  En medio de todo esto, yo veo la obra terminada de Cristo.  Él dijo: “¡Consumado es!”  Así que la sanidad de mi hijo se ha llevado a cabo.  Mi matrimonio está bendecido.  Mis deudas están saldadas.  Yo no dejaré que mi corazón se preocupe por estas cosas.”

Amado, yo no puedo “no dejar” por ti.  Tu familia y amigos no pueden “no dejar” por ti.  Solo puedes “no dejar que tu corazón se turbe.”  Así que guarda tu corazón para que no se turbe.  Tú no tienes que guardar tu carrera, tu reputación, tus hijos o incluso tu salud.  ¡Cuando tú guardes tu corazón, Dios guardará todo lo demás por ti!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

miércoles, 21 de octubre de 2020

La Promesa Del Padre

 Inspiración de Gracia

“Pero recibiréis poder cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros; y Me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.  (Hechos 1:8)

Antes de que Jesús regresara al cielo, Él les dijo a Sus discípulos que “esperaran la promesa del Padre.” (Hechos 1:4)  Hay miles de promesas en la Biblia, así que, ¿a qué promesa se refería Él?

La iglesia primitiva sabía a qué promesa se refería Jesús porque Él les había dicho a Sus discípulos: “No se alejen de Jerusalén, sino esperen la promesa del Padre, de la cual les he hablado: Juan bautizó con agua, pero dentro de pocos días ustedes serán bautizados con el Espíritu Santo.” (Hechos 1:4-5, NVI)  Jesús estaba refiriéndose al bautismo en el Espíritu Santo y hablar en diferentes lenguas. (Ver Hechos 2:1–4)

Jesús quiere que tú conozcas el valor de la Promesa del Padre porque Él dijo: “Recibirán poder cuando el Espíritu Santo venga sobre ustedes; y Me serán testigos...”  Él no dijo: “Me harán un testimonio”, sino “Me serán testigos.”  En otras palabras, ¡tu persona será un testigo de Él!

Esto se debe a que el poder que tú recibes cuando eres bautizado en el Espíritu Santo es el mismo poder que ungió a Pedro de tal manera que las personas sacaban a los enfermos a las plazas y los ponían en camillas para que, su sombra cayera sobre alguno de ellos y lo sanara. (Ver Hechos 5:15)  Incluso los pañuelos y delantales que habían tocado el cuerpo de Pablo estaban tan saturados con la unción del Espíritu que cuando estos tocaban a los enfermos, ¡las personas eran testigos de enfermedades y espíritus malignos que dejaban a los enfermos! (Ver Hechos 19:12)

Ese mismo poder hizo que un miembro de la iglesia bautizado con el Espíritu Santo, que oraba en lenguas, experimentara el poder sanador de Dios cuando impuso las manos sobre su madre, que estaba en una etapa avanzada de cáncer.  Y debido a que fue sanada, ella se convirtió en testigo del amor y el poder de Dios para sus amigos y familiares incrédulos.

Amado, cuando eres bautizado en el Espíritu Santo, ¡tú vas a ser testigo para otros de que ningún problema, prueba, enfermedad o dolencia es comparable al poder del Espíritu en ti!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

martes, 20 de octubre de 2020

Tú Eres El Amado De Dios

Inspiración de Gracia

Para la alabanza de la gloria de Su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado.  (Efesios 1:6)

En el río Jordán, Jesús escuchó a Su Padre decirle: “Tú eres Mi Hijo amado; en Ti tengo complacencia.” (Lucas 3:22)  Más adelante, en el desierto, Jesús escuchó al diablo decirle: “Si eres Hijo de Dios...” (Lucas 4:3)

Nota que el diablo no solo cuestionó la filiación de Jesús, sino que también escondió la palabra “amado” cuando le dijo a Jesús: “Si eres Hijo de Dios...”  Verás, el diablo no puede recordarte que tú eres el amado por Dios porque cuando tú sabes esta verdad, ¡todo lo que él quiera levantar contra ti no tendrá éxito!

Muchas chicas están regalando su virginidad porque necesitan sentirse queridas y amadas.  Y los muchachos se unen a las pandillas para sentirse aceptados porque otras personas los han rechazado y los han hecho sentir inútiles.

Pero cuando tú sabes que tú eres el amado de Dios, ninguna tentación puede triunfar contra ti, ni siquiera los “gigantes” que puedan provocarte.  Piensa en David, que mató a Goliat.  “David” en hebreo significa “amado.”  Se necesita un David para derribar a un gigante.  En otras palabras, ¡se necesita alguien que sepa que es el amado de Dios para ganar las batallas de la vida!

Tú eres el amado de Dios, no por lo que haces.  Cristo ya lo hizo todo.  Él es el Amado de Dios.  Pero Dios te puso en Cristo.  Por eso, tú eres “acepto en el Amado.”  Y lo que Dios le dijo a Jesús, Él te lo dice a ti hoy: “Tú eres Mi hijo amado; en ti tengo complacencia.”

Así que, si el diablo te dice: “Oye, ¿tú te llamas a ti mismo 'el amado de Dios' después de lo que acabas de hacer?”  Ten la seguridad de que esto no depende de lo que has hecho, sino de lo que Cristo ha hecho.  ¡Y tú aun eres el amado de Dios, porque tú estás en Cristo!

Cuando tú dices eso, yo creo que el diablo grita de frustración porque él no tiene poder sobre ti cuando tú estás consciente de que eres el amado de Dios.  Ciertamente estás en un lugar seguro cuando sabes que tú eres Su amado.

Amigo, no estamos siendo orgullosos cuando nos llamamos amados de Dios a nosotros mismos.  ¡Cómo podríamos jactarnos cuando sabemos que es la gracia de Dios la que nos ha hecho aceptos en el Amado!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

lunes, 19 de octubre de 2020

‘Todo Lo Mío Es Tuyo’

 Inspiración de Gracia

… ‘Hijo mío, tú siempre has estado conmigo, y todo lo mío es tuyo.’  (Lucas 15:31)

Después de hacer algunos mandados para sus padres, un niño se acercó a su padre y le dijo: “Yo sé por qué mamá y tú me tuvieron.”  “¿Por qué?” preguntó su padre. “¡Para tener a alguien que haga los mandados por ustedes!” exclamó el niño.

Como ese niño, ¿estás tú viendo a Dios como un Padre que demanda de ti obediencia y servicio?  ¿Alguna vez ha sentido que a menos que lo obedezcas y guardes todos Sus mandamientos, tú no tienes derecho a ser bendecido por Él?

Jesús compartió la historia del hijo pródigo para mostrar cómo algunos de nosotros llamamos a Dios “Padre” y, sin embargo, no conocemos Su corazón.  Hay dos hijos en esta parábola.  Nosotros sabemos lo que le sucedió al hijo pródigo, pero también podemos aprender algo acerca del hijo mayor.  Esto es lo que él le dijo a su padre cuando descubrió que su padre había organizado una fiesta para celebrar el regreso de su hermano irresponsable y derrochador: “Mira, por tantos años te he servido y nunca he desobedecido ninguna orden tuya, y sin embargo, nunca me has dado un cabrito para regocijarme con mis amigos.“ (Lucas 15:29)

Ahora, este hijo creía que su padre lo había traído al mundo para que le sirviera.  Él vio a su padre como alguien que le daba mandamientos todo el tiempo.  Y se veía a sí mismo como alguien que tenía que obedecer esos mandamientos para disfrutar de su herencia.  Pero la verdad es que el padre ya le había dado su herencia. (Ver Lucas 15:12)  El padre incluso le recordó amorosamente: “Hijo mío, tú siempre has estado conmigo, y todo lo mío es tuyo.”  ¡Y yo estoy seguro de que esa herencia incluía a más de una cabra!

¿Acaso tú, como el hijo mayor, has fallado en entender el corazón de tu Padre?  Tu Padre celestial ya te dio una rica herencia en Cristo cuando te convertiste en Su hijo.  Él quiere que tú sepas que has recibido el Espíritu de adopción. (Ver Romanos 8:15)  Así que llámalo: “¡Abba, Padre!” y conoce cuanto Él te ama.  Debido a que tú eres Su heredero, ¡todo lo que Él tiene es tuyo, para que lo disfrutes hoy!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

domingo, 18 de octubre de 2020

Heredero Del Mundo Hoy

Inspiración de Gracia

Porque la promesa a Abraham o a su descendencia de que él sería heredero del mundo, no fue hecha por medio de la ley, sino por medio de la justicia de la fe.  (Romanos 4:13)

Dios le prometió a Abraham que él sería el heredero del mundo.  Ahora, no te apresures a decir: “Bueno, esa promesa fue hecha solo a Abraham, no a mí.”  El versículo dice: “Porque la promesa a Abraham o a su descendencia de que él sería heredero del mundo, no fue hecha por medio de la ley, sino por medio de la justicia de la fe.”  Así que la promesa no solo fue hecha a Abraham, sino también a “su simiente,” es decir, a ti y a mí que pertenecemos a Cristo —“Y si sois de Cristo, entonces sois descendencia de Abraham y herederos según la promesa.” (Gálatas 3:29)

Nota que Dios no dijo que tú serías el heredero del país en el que vives, ¡sino el heredero del mundo!  La palabra griega para “mundo” utilizada aquí es kosmos, que significa el universo y también el círculo completo de bienes, habilidades, beneficios y placeres terrenales.  Todos estos son suyos para que los heredes por medio de la justicia de la fe en Jesús y Su obra terminada en la cruz.  Esta justicia se te ha dado a ti como un regalo de Dios, de manera que tú no tienes que ganarla por medio de buenas obras.

Para que Dios cumpla Su promesa, Él tiene que prosperarte.  ¡Tú no puedes ser el heredero del mundo y tener escasez o deudas!  No solo eso, Él debe mantenerte saludable porque tú no puedes heredar el mundo cuando estás enfermo y siempre acostado.

No escuches a las personas que te dicen que tú solo vas a disfrutar de estas bendiciones cuando llegues al cielo un buen día.  ¿Por qué razón necesitarías riquezas en el cielo?  Allí, incluso las calles están hechas de oro puro. (Ver Apocalipsis 21:21)  ¿Y por qué razón necesitarías sanidad en el cielo?  Allí no hay ninguna enfermedad.  ¡Así que, tú necesitas la salud y la provisión aquí y ahora!

Amado, Dios quiere que tú seas heredero del mundo hoy.  Así que toma de tu rica herencia hoy.  Jesús pagó por ella con Su sangre.  ¡No tomes esto a la ligera!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince