Y poderoso es Dios para hacer que
abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las
cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra.
2 Corintios 9:8
¿Recuerdas las palabras que Dios pronunció sobre
Abraham? Él dijo: “Yo te bendeciré, y engrandeceré tu nombre, y serás de bendición.”
(Génesis 12:2)
Amigo, mientras confías en Dios y caminas más y más
en la plenitud de la bendición de Abraham, ten la revelación de que Él te bendice porque Él te ama, y te da el privilegio de ser una extensión
práctica de Su amor hacia tu comunidad, tu país y más allá.
La provisión financiera de Dios tiene un propósito
divino. No uses a las personas y ames el
dinero. En vez de eso, ¡utiliza el dinero para amar a las
personas! Cuando se trata de nuestra
relación con las personas, siempre es de
mayor bendición dar que recibir. Mantén
tus ojos y tu corazón en la abundancia, mira a tu alrededor a las personas necesitadas y bendícelas. ¡Deja
que tu luz brille ante los hombres para gloria del nombre de Jesucristo!
Hoy, ¡mira Su
gracia abundante rebosando hacia ti y tu familia para que tengas abundancia
para toda buena obra!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince
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