… “Bástate Mi gracia; porque Mi poder
se perfecciona en la debilidad.”
2
Corintios 12:9
Mientras tú digas: “Yo puedo”, Dios “no puede”
interrumpir en tu vida. Cuando te apoyas
en tus propias fuerzas y crees que tú puedes hacerlo, Dios no podrá
ayudarte. Él no te impondrá Su ayuda cuando tú no creas necesitarla. Pero cuando tú te vuelvas hacia Él y le
digas: “Yo no puedo,” ¡Oh Él puede, Él
puede! Su “Yo puedo” fluirá a través
de tu “no puedo.” Su poder se perfecciona en tu debilidad.
Amado, cuando tú dices: “Yo puedo”, estás diciendo
que no necesitas salvación, y el
Salvador te dejará ser. Pero cuando lo
buscas a Él y le dices: “Señor, no puedo dejar este mal hábito tan grande”, Él
te dirá: “No hay problema. Yo Soy un Salvador más grande que ese hábito.” Él se apresurará a salvarte. Él te dará el poder para superarlo.
Cuando tú lo buscas a Él y le dices: “Señor, yo no
puedo cambiar a mi cónyuge. No puedo cambiar a mi hijo. Estoy tan cansado. Por favor, toma el control”, Él te dirá: “No hay problema. Mírame hacer un trabajo profundo de
transformación en sus vidas y en la tuya”.
¡Él obrará en ti, a través de ti y para ti, y lo que parece imposible
para ti, se convertirá en posible!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph
Prince
No hay comentarios:
Publicar un comentario