Inspiración De Gracia
“Por
tanto, hermanos, sabed que por medio de Él os es anunciado el perdón de los
pecados; y que de todas las cosas de que no pudisteis ser justificados por la
ley de Moisés, por medio de Él, todo aquel que cree es justificado.” Hechos 13:38-39
En Hechos 14:8-10, donde Pablo sana a
un hombre lisiado en Listra, vemos que Pablo no impone sus manos sobre el
hombre para sanarlo. La fe para ser
sanado provino simplemente de escuchar a Pablo predicar el evangelio de Jesucristo, y cuando él simplemente respondió al
mandato del apóstol de ponerse de pie, él fue sanado.
Si bien lo que Pablo le predicó al hombre no se registró
para nosotros, tenemos uno de los sermones de Pablo registrado para nosotros, palabra
por palabra por el Espíritu Santo, en el capítulo anterior. (Hechos 13:16–41) Y el punto culminante o destacado de este
sermón se encuentra en las escrituras de hoy.
Ahora, escucha esto cuidadosamente: el poder del evangelio
que Pablo le predicó al hombre lisiado se encuentra en el perdón de todos los
pecados para “todo aquel que cree”. No hay otro requisito para ser perdonado de
todos tus pecados.
El antiguo pacto se basaba en la justificación por obras
(obediencia a los Diez Mandamientos). Tú
tenías que actuar para ser perdonado. Pero
el nuevo pacto de la gracia se basa completamente en la justificación por fe
(creer en Jesucristo). ¿Puedes ver la diferencia radical?
La demanda ya no está en ti, sino en Cristo. Esta es la buena noticia: ¡todos los que creen en Jesús reciben el perdón de
todos sus pecados y son justificados de todas las cosas! ¿Buenas noticias? ¡Aleluya! ¡No hay mejor noticia que esta!
Nosotros hemos experimentado esto una y otra vez en los
servicios de nuestra iglesia. Mientras
las personas se sientan en el servicio y escuchan el evangelio de la gracia y la
obra terminada de Jesús se predica, ¡los milagros de sanidad estallan!
Esto ha sucedido no solo en los servicios de nuestra
iglesia, sino también en otros lugares. Uno
de mis queridos amigos, Marcel Gaasenbeek, compartió conmigo un maravilloso
milagro de sanidad que tuvo lugar en su automóvil mientras conducía hacia
Rumania con algunos amigos. Marcel es
pastor de una dinámica iglesia de gracia en Holanda y en este día en
particular, estaba de camino a Rumania para un compromiso de predicación. Él estaba
escuchando uno de mis sermones en su automóvil, algo que hacía a menudo.
Arrullado por la monotonía del largo viaje, uno de los
amigos de Marcel se quedó dormido en el asiento trasero. Este amigo había estado involucrado en un
accidente de una moto de agua hace algunos años y, desde entonces, a menudo
sufría dolores agudos en la espalda. De
alguna manera, a través de la niebla del sueño, él me escuchó predicar esto: “Jesús
ya te ha sanado y el diablo es el que te está dando síntomas de mentira en tu cuerpo”.
Él dijo “¡Amén!” en su corazón, estando de acuerdo en que
Jesús ya lo había sanado, tomando su
pecado y cargando sus enfermedades y dolores en la cruz. En ese momento, él sintió que el poder de Dios
lo atravesaba, ¡y él fue completamente sanado! ¡Todo el dolor en su espalda se había ido!
Ese es el poder de escuchar, y escuchar el evangelio de
Jesús. ¡Así es como la fe viene! Cuanto más escuches de Jesús, más de Su gracia
recibirás. Cuanta más revelación obtengas
de Su obra terminada, más impartición de fe recibirás para cualquier situación,
¡incluso las aparentemente imposibles!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince
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