recibe pequeños mensajes de gracia todos los días

viernes, 5 de noviembre de 2021

Cambia Tus Palabras, Cambia Tu Vida

 Inspiración De Gracia


Señor, pon guarda a mi boca; vigila la puerta de mis labios.  Salmos 141:3

¿Sabes qué es lo contrario a hablar bien?  Es maldecir.  Cuando nuestro Señor maldijo la higuera, ¿qué dijo Él?  ¿Acaso Él dijo: “Yo te maldigo, higuera”?  No, Él simplemente dijo: “Nunca jamás coma nadie fruto de ti”. (Marcos 11:14)  Y al día siguiente, cuando ellos pasaron de nuevo junto a la higuera, Pedro dijo: “Rabí, mira, la higuera que maldijiste se ha secado”. (Marcos 11:21)

Jesús nunca usó la palabra maldecir cuando le habló a la higuera, pero Él tampoco corrigió a Pedro porque él tenía razón —las palabras negativas habladas equivalían a una maldición.  ¡Oh, espero que lo hayas entendido!  Muchas veces las personas no se dan cuenta de que, sin querer, se están maldiciendo a sí mismas y a las personas que las rodean con el flujo constante de palabras negativas que hablan de sí mismas y de los demás.  Las palabras de derrota, enojo, amargura y queja son tóxicas.  Cambia tus palabras y cambia tu vida.  ¡Elimina las palabras negativas de tu vida con las palabras de la gracia, el amor y el poder de Dios!

Y ten en cuenta que cuando Jesús le habló a la higuera, esta no se secó instantáneamente.  Esto se debió a que cuando nuestro Señor le habló a la higuera, esta primero se secó en su raíz antes de que la muerte llegara a las hojas.  Así que, no te desanimes cuando le hables a tu dificultad y parezca que nada sucede.  ¡Cree que le estás hablando directamente a la raíz del problema y que la manifestación externa de tu fe está en camino!

Recibí este maravilloso testimonio de la hermana Lorraine, que reside en Darby, Inglaterra.  Este nos muestra el poder de orar o hablar, y cómo comienza el cambio desde el primer día que tú hablas:

Mi hijo y su esposa han estado casados ​​durante diez años y estaban tratando desesperadamente de tener un bebé, sin éxito.  Hace seis años, comenzaron a someterse a tratamientos de fertilización in vitro (FIV) y tuvieron al menos siete tratamientos sin éxito.

En marzo pasado, mi hermana me dio una copia de su devocional y la publicación del 19 de marzo trataba sobre clamar la sangre del Cordero de Dios sobre todo lo que es nuestro y de nuestras familias.  El versículo en el devocional era Éxodo 12:13  —“Y cuando Yo vea la sangre pasaré sobre vosotros, y ninguna plaga vendrá sobre vosotros para destruiros cuando Yo hiera la tierra de Egipto.”   Y usted compartió que lo que las nueve plagas no pudieron hacer, lo hizo la sangre.

Yo me emocioné cuando leí esto.  Así que oré por mi hijo y mi nuera, clamando la sangre de Jesús sobre su situación, y estaba tan emocionada porque sabía que algo había sucedido en el espíritu.  Pocas semanas después de haber orado, mi hijo me llamó para decirme que su esposa estaba embarazada.  Yo le dije que no me sorprendía, ya que había orado por ambos recientemente.  De manera que, lo que seis años de tratamiento médico no pudieron hacer, ¡la sangre de Jesús lo hizo!  Todos celebramos y estábamos muy emocionados.

Unos domingos más tarde, nuestro hijo llamó para decir que tenía exactamente ocho semanas de embarazo.  Y fueron exactamente ocho semanas desde el día en que oré.  ¡Aleluya!

Sea lo que sea por lo que estas creyendo en Dios, quiero animarte a que abras tu boca para hablar Su Palabra.  ¡Ora a tu Abba y proclama la sangre de nuestro Señor Jesús sobre tu situación!  La presencia de sangre significa que ha habido una muerte.  Esto significa que ya se ha realizado un pago.

Hoy nosotros podemos apoyarnos sobre el fundamento inquebrantable de las promesas de Dios porque el Cordero de Dios fue sacrificado en el Calvario y Su sangre está en los postes de nuestras vidas.  Nosotros podemos declarar que ninguna plaga, ninguna muerte, ningún castigo, ningún daño, ningún peligro, ningún mal puede acercarse a nuestra morada porque el pago total por nuestros pecados ya fue hecho por nuestro Señor Jesús.  ¡Qué maravillosa certeza y paz podemos tener hoy —todo gracias a la obra completa y eficaz de Jesús!

Viendo a través de los ojos de la fe,

Joseph Prince

No hay comentarios:

Publicar un comentario