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sábado, 20 de julio de 2013

No Tu Amor, Sino Su Amor


Medite En

En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó a nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros pecados.
1ª Juan 4:10


El resumen de toda la ley es amar a Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente (Mateo 22:37-40).  Pero déjeme preguntarle esto: ¿Alguna vez ha sido alguien capaz de amar al Señor con todo su corazón, toda su alma y con toda su mente?
La respuesta es obvia.  Ni una sola persona ha sido capaz de hacer eso.  Y Dios sabía todo el tiempo que, según la ley, nadie puede amarlo tan perfectamente.  Entonces, ¿sabe lo que Él hizo?  Envió a Su Hijo Jesús. Cuando lo hizo, Él indudablemente estaba diciéndonos esto: “Yo sé que ustedes no pueden amarme perfectamente, así que fíjense en Mí ahora.  Yo voy a amarlos con todo Mi corazón, con toda Mi alma, con toda Mi mente y con todas Mis fuerzas.”  Y Él extendió completamente Sus brazos y murió por nosotros!
Amigo, tome tiempo para llevar esto a su corazón en este día: La cruz no es una demostración de nuestro perfecto amor y devoción a Dios.  La cruz es la demostración de Dios, de Su perfecto amor y Su perfecta gracia (favor inmerecido) hacia nosotros.  Permítame darle la definición bíblica de amor, para hacer esto aún más claro para usted: “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó a nosotros y envió a Su Hijo como propiciación por nuestros pecados.”  Este es el énfasis del nuevo pacto de la gracia (favor inmerecido) –Su amor por nosotros, no nuestro amor por Él.  Y cuando nosotros nos enfocamos en Su amor por nosotros, terminamos amándolo a Él y a los demás sin ningún esfuerzo!

Bendiciones,
Joseph Prince


Mateo 22:37-40  37 Y Él le dijo: Amaras al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente. 38 Este es el grande y el primer mandamiento. 39 Y el segundo es semejante a éste: Amaras a tu prójimo como a ti mismo. 40 De estos dos mandamientos dependen toda la ley y los profetas.


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