Inspiración De Gracia
Porque
has puesto al Señor, que es mi refugio, al Altísimo, por tu habitación. No te
sucederá ningún mal, ni plaga se acercará a tu morada. Salmos 91:9-10
Sé que puede ser muy difícil sentir el amor de Dios por ti cuando te
enfrentas a múltiples síntomas en tu cuerpo, crecen las deudas a causa de tus
facturas médicas y te preocupas por tu futuro. Vivimos en un mundo donde estamos gobernados
por nuestros cinco sentidos, y hay momentos en los que es difícil creer en el
amor de Alguien a quien no podemos ver, tocar o escuchar.
Pero no podemos depender de los sentimientos y las
circunstancias externas (que pueden cambiar) para estar seguros del amor de
Dios por nosotros. Es tan importante que
fijemos nuestros ojos, en cambio, en nuestro Señor Jesús, cuyo amor por nosotros
es perfecto, nunca cambia y nunca falla.
¿Puedo compartir contigo algunas de las cosas que puedes
hacer que creo que te ayudarán a mantenerte en Su perfecto amor?
En lugar de permitir que el enemigo te alimente con
mentiras que te causen temor, sigue escuchando mensajes que te mantengan
consciente del amor de Dios por ti. Abraza
Su amor para expulsar todo temor.
Cada vez que el enemigo intente atacarte con temores,
conéctate con una prédica que magnifique la bondad y el amor del Señor por ti. En lugar de ceder a las artimañas del enemigo,
sigue escuchando prédicas sobre la obra terminada de Jesús.
En lugar de leer artículos en Internet que te digan cuán
grave puede llegar a ser tu condición, o leer tu informe médico una y otra vez,
lee testimonios de alabanza sobre el amor y la fidelidad del Señor. Lee pasajes de las Escrituras que hablen de Su
amor y Sus promesas de sanidad. Guárdate
con la Palabra de Dios y permanece Su amor.
La Biblia nos dice: “Y
nosotros hemos llegado a conocer y
hemos creído en el amor que Dios tiene
para nosotros. Dios es amor, y el que
permanece en amor permanece en Dios, y Dios en él”. (1 Juan 4:16)
No es suficiente conocer versículos sobre Su amor. Sigue
meditando en ellos hasta que creas
que Él te ama.
Cuando nos mantenemos conscientes del amor de Dios, estamos
permaneciendo en Dios. En otras
palabras, lo estamos convirtiendo en nuestro lugar de morada. Eso es tan poderoso porque cuando el Señor es
tu morada, tú estás en un lugar seguro y protegido.
Lee el Salmo 91 y declara sobre ti mismo que no te sucederá
ningún mal, ni plaga se acercará a tu morada. Mientras tú permaneces en Él, el Dios
todopoderoso se convierte en tu refugio y fortaleza.
No importa cuántas personas hayan muerto a causa de la
enfermedad que te diagnosticaron. Mil
pueden caer a tu lado y diez mil a tu diestra, pero a ti no se acercará. (Sal.
91:7) E incluso si ya estás en
problemas, el Señor está contigo y Él te librará.
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince