Medite En
No
quebrantaré Mi pacto, ni cambiaré la palabra de Mis labios.
Salmo 89:34
Cuando Dios
prometió a Abraham darle la tierra, Abraham le preguntó: “Dios, ¿cómo puedo
estar seguro?” Y como si Su palabra no fuera
lo suficientemente buena, Dios fue un paso más allá y estableció un pacto con Abraham,
comprometiéndose irrevocablemente a ello, para asegurar a Su amigo que Él haría
lo que había prometido (Génesis 15:7-8, 18).
Déjeme
decirle algo acerca de los pactos de Dios. Nunca se pueden romper, solamente pueden ser reemplazados
por uno mejor. Amigo, Dios hará lo que le
ha prometido, y para mantener a su corazón en paz, Él se amarró a Sí mismo a un
pacto con usted cuando lo estableció con su representante, Jesús, en el
Calvario.
Así que descanse
sabiendo que tiene a un Dios que guarda Sus pactos y que NO PUEDE romper Su
pacto o renegar de Sus promesas. Simplemente
apóyese en Su fidelidad y al igual que Abraham, usted caminará en su herencia y
sanidad.
Bendiciones,
Joseph Prince
Joseph Prince
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