Amado, yo deseo que tú seas
prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.
3a
Juan 1:2
Cuando Juan, el apóstol del amor, escribió su
tercera carta, él ya era un hombre mayor que había caminado con el Señor
durante muchos años. Si alguien conocía el deseo del corazón del Señor
para Su pueblo, ese era Juan.
Juan sabía sin lugar a
dudas que el deseo del corazón del Señor por Su pueblo es que ellos sean
bendecidos y que tengan salud, así como sus almas prosperan. Su corazón simplemente se deleita cuando Su
pueblo está experimentando bendiciones en cada área de sus vidas.
Amado, el Señor se complace cuando tú estás feliz y saludable, disfrutando tu matrimonio, a tus hijos y tu carrera profesional. A Él le
complace cuando tu puedes poner comida en la mesa, y tener más que
suficiente para bendecir a las personas a tu alrededor.
Recibe este día una fresca revelación de Su inconmensurable amor por ti, ¡y comienza a
caminar más y más en las buenas cosas que Él tiene guardadas para ti!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph
Prince
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