Inspiración De Gracia
“Me
invocará, y le responderé; Yo estaré con él en la angustia; lo rescataré y lo
honraré.” Salmos
91:15
Nosotros tenemos un Dios
que quiere que corramos hacia Él. Y en el momento en que lo hagamos,
Él ha prometido que Él nos responderá. No es que “podría
respondernos” o “quizá nos responda”, sino definitivamente “nos responderá”.
Y Él no se detiene con solo asegurarnos que Él
nos responderá. Él va más allá y deja registrado para toda la
eternidad, diciendo: “Yo estaré con él en la angustia; lo
rescataré y lo honraré”.
¿Sabes por qué nosotros podemos tener la
seguridad de que cuando clamemos a Él, Él nos
responderá? Es por el intercambio divino que tuvo lugar en la cruz,
en donde nuestro Señor Jesús clamó: “Dios Mío, Dios Mío, ¿por qué Me
has abandonado?” (Mateo 27:46)
Él fue abandonado —dejado sin ayuda,
completamente desamparado y olvidado— para que hoy, nosotros podamos tener
la confianza de que nuestro Padre celestial nunca nos dejará ni nos
desamparará. (Heb. 13:5) ¡Qué Salvador!
¿No te sientes tan amado y tan apreciado por
nuestro Señor?
Y Él hizo que fuera fácil para nosotros
recibir Sus promesas —nuestra parte es simplemente clamar a Él y
permitir que Él sea nuestro Dios. Sea lo que sea por lo que estás
pasando hoy, clama a Él ahora mismo, ¡y Él te librará y te honrará!
Siempre que yo estoy preocupado, le digo al
Señor: “Señor, estoy preocupado por esta situación, pero ahora mismo la pongo
en Tus manos perforadas por los clavos. Yo entrego en Tus manos
todas mis preocupaciones, mis ansiedades y mis intereses en esta área”.
Entonces, yo recibo Su paz, y cuando el
enemigo intenta disparar nuevas flechas de temor a mi corazón y a mi mente, me
recuerdo a mí mismo que la situación ya está en las manos del
Señor. ¡Me recuerdo a mí mismo de Su promesa de que Él me librará!
¿Estás viviendo con ataques de pánico, temor y
ansiedad crónica? No permitas que el diablo te paralice con todo
tipo de imágenes mentales negativas o imaginando todos los peores escenarios en
tu cabeza.
¡Clama a tu Salvador,
Jesucristo! Él quiere que tú eches “toda tu
ansiedad sobre Él, porque Él tiene cuidado de ti”. (1 Ped.
5:7) Tú no eres una oveja sin Pastor, así que deja de intentar
cargar con todas tus preocupaciones sobre tus propios hombros.
Ya sea que se trate de un síntoma en tu cuerpo,
una dificultad financiera o una situación familiar lo que te preocupa, clama a
Él y deja que Su paz guarde sobrenaturalmente tu corazón en cada área en la que
te sientes atribulado. (Fil. 4:6–7)
Viendo a través de los ojos de la fe,
No hay comentarios:
Publicar un comentario