Abrirá el Señor para ti Su buen tesoro,
los cielos, para dar lluvia a tu tierra a Su tiempo y para bendecir toda la
obra de tu mano; y tú prestarás a muchas naciones, pero no tomarás prestado.
Deuteronomio 28:12
En la
Biblia, la lluvia por lo general
habla de bendiciones. Incluso hoy en día, los israelíes dan gracias
a Dios cuando llueve, porque saben que cuando
Él les da lluvia, Sus bendiciones serán abundantes. Su ganado se alimentará en grandes extensiones
de pastos verdes y comerán forraje oreado y curado. Y cuando ellos ven ríos y corrientes de agua
que fluyen de sus montañas y colinas (Isaías 30:23-25), ellos saben que los tiempos de refrigerio han llegado.
De la
misma manera, tú puedes esperar que Dios
haga llover Sus bendiciones sobre ti y bendecir la obra de tus manos. Entonces, vas a llegar al lugar en donde “prestarás a muchas naciones, pero tú no
tomarás prestado.” Jesús
quiere que sepas que esto es una bendición por
la que Él murió para ti, porque cuando murió, Él ni siquiera tenía una
tumba de Su propiedad. Él fue puesto en
una tumba prestada, para que tú puedas
tener el poder para prestar.
De
hecho, nuestra iglesia es un testimonio de esta bendición. Cuando me uní a la iglesia a tiempo completo, ésta
era muy pequeña —cerca de 100 miembros. Sin embargo, el Señor ha hecho llover Sus
bendiciones sobre nosotros y ha bendecido la obra de nuestras manos. Hoy en día, tenemos una congregación de más de
30,000 miembros y seguimos creciendo. Nuestra iglesia está dando apoyo a muchos ministerios, tanto a nivel
local como en el extranjero. Seguimos
viendo a Dios derramando Sus bendiciones de provisión y crecimiento en
nosotros, y le damos gracias por todas las cosas buenas que nos están sucediendo.
Mi
amigo, no hay nada que puedas hacer acerca de la lluvia, sino dejarla caer. Así que, ¡solo
espera que Dios haga llover Sus bendiciones sobre ti! ¡Déjalas
caer! Y serás bendecido con más que suficiente, para que con tus
necesidades y las necesidades de tu familia, más que satisfechas, ¡tú puedas
ser una bendición para los demás
también!
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince
Pensamiento
Del Día
Cuando Dios hace llover Sus bendiciones sobre ti, tú
vas a ser bendecido con más que suficiente para poder ser una bendición para
otros.
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