Medita En
Y Él me ha dicho: “Te basta Mi gracia, pues Mi poder se perfecciona
en la debilidad.” Por tanto, muy gustosamente me gloriaré más bien en mis
debilidades, para que el poder de Cristo more en mí”. (2 Corintios 12:9)
Me encanta cómo en
Lucas 24, el Espíritu Santo registra elaboradamente para nosotros la reunión que Jesús tuvo con los dos discípulos en
el camino a Emaús el primer día de Su resurrección. Con sus corazones cargados, afligidos y conmocionados,
ellos hablaban sobre cómo Jesús, a quien apreciaban mucho, había sido llevado
por los líderes religiosos, condenado a muerte y crucificado.
Lee la historia
completa y nota cómo los dos discípulos fueron atrapados por su propia comprensión de los eventos
que habían sucedido y sus pensamientos
sobre la redención de Israel. Como
resultado, ellos estaban abatidos, decepcionados y deprimidos. Esto es lo que sucede cuando la verdad acerca
de Jesús está ausente de nuestras mentes.
Los discípulos
esperaban que Jesús fuera quien redimiría a Israel. Para ellos, Jesús era simplemente el medio
para un fin. Ellos estaban más
consumidos con la redención de Israel que con el Redentor Mismo. ¡No es de extrañar que estuvieran deprimidos! Jesús nunca puede ser simplemente el medio
para un fin, no importa cuán noble sea ese fin. Nosotros necesitamos estar ocupados con Él y dejar
que todo gire a Su alrededor mientras Él toma el lugar central en nuestras vidas.
Los discípulos estaban
abatidos porque no creían en lo que la Palabra de Dios había profetizado acerca
del sufrimiento y la resurrección de Jesús. Si ellos hubieran creído y entendido que los
eventos de los últimos tres días habían sido completamente orquestados por Dios y que la cruz fue Su gran plan de redención para salvar a todos los hombres,
se habrían regocijado con fe, amor y esperanza. Habrían estado anticipando en gran medida su
reunión con el Cristo resucitado en vez de estar tan desanimados, solamente buscando
en su interior. Pero debido a sus
creencias equivocadas, ellos se desilusionaron y fueron mentalmente derrotados.
Si tú te estás
sintiendo temeroso, ansioso o deprimido hoy, haz esta revisión rápida. ¿Qué hay en tu mente? ¿Con qué está ocupado tu corazón? ¿Están tus pensamientos llenos de fe en Jesús,
el Pastor de tu vida, o están llenos de aprensiones sobre el futuro, temores
sobre tu situación actual y auto-introspección excesiva? Dale a
Él el lugar central creyendo que Él es la respuesta a todo lo que tú necesitas
en la vida y comienza a caminar en una nueva medida de Su paz, alegría y
libertad.
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince
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