Inspiración de Gracia
Él ha hecho todo hermoso en su tiempo… (Eclesiastés 3:11)
Nada te sucede por accidente cuando tienes a
Dios en tu vida. Incluso un encuentro
“casual” con alguien es parte de Su plan para poner en marcha Sus bendiciones en
tu vida.
Tal fue la reunión
divinamente arreglada entre la mujer sunamita y el profeta Eliseo. Esto llevó al profeta a pronunciar sobre ella
la bendición de un niño milagroso a pesar de que ella era estéril y su esposo
era anciano. (Ver 2 Reyes 4:8–17) Pocos
años más tarde, fue esta amistad con el hombre de Dios, lo que la ayudó a
superar una crisis cuando su hijo enfermó gravemente y murió —Eliseo resucitó a
su hijo. (Ver 2 Reyes 4:18–37)
Cuando Dios es quien
está orquestando los eventos en tu vida, ni la escasez ni el peligro ni la
destrucción pueden afectarte. Cuando el
hambre azotó la tierra, la familia de la mujer sunamita no sufrió porque a
través de Eliseo, Dios les había dicho que abandonaran la tierra. Ellos se fueron a la tierra de los filisteos
y vivieron allí durante los siete años de hambre. (Ver 2 Reyes 8:1–2)
Dios puede ubicarte en
el lugar correcto en el momento correcto, incluso a través de tu toma de
decisiones diaria. La mujer sunamita
regresó a Sunem después de que el hambre terminó. Entonces ella
decidió pedir ayuda al rey de Israel para recuperar su casa y su tierra,
que otros habían adquirido ilegalmente durante su ausencia. Esta decisión la
llevó ante el rey el mismo día en que Giezi, el siervo de Eliseo, estaba en
audiencia con el rey.
El rey quería escuchar
todo sobre los milagros realizados por Eliseo. Esto le dio a la mujer sunamita la oportunidad
de compartir de primera mano con el rey cómo Eliseo había resucitado a su hijo
de entre los muertos. Entonces, el rey,
emocionado, ordenó que se le restituyera su casa y su tierra, incluidas todas
las ganancias de su tierra desde el día en que se había ido hasta entonces. (Ver
2 Reyes 8:3–6) ¡El Señor había
cronometrado y preparado todo hermosamente para ella!
Amado, Dios también
puede hacer todas las cosas hermosas en su momento para ti. A medida que tú lo involucres en tu vida
diaria y confíes en Su amor por ti, tú también vas a verlo a Él dirigirte y
ubicarte en el lugar correcto, en el momento correcto, para que disfrutes Sus
bendiciones.
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince
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