Inspiración de Gracia
Hermanos, yo mismo no considero haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago; olvidando lo que queda atrás y extendiéndome a lo que está delante, prosigo hacia la meta para obtener el premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:13-14)
¿Estás viviendo una vida de arrepentimientos
pensando, “Si tan sólo...”? “Si tan solo
tuviera esa educación universitaria... Si
tan solo me hubiera casado con la chica adecuada... Si tan solo hubiera aceptado el otro
trabajo... Si tan solo no hubiera
cometido ese estúpido error...”
¿Está tu pasado robándote
la alegría de hoy? ¡Entonces olvida tu
pasado!
Tú podrías decir: “¡Pero
Pastor Prince, usted no sabe lo que yo hice en el pasado!”
Piensa en Pablo. Si el diablo tuviera algo que presentar contra
Pablo, serían recordatorios de cómo él persiguió a la iglesia primitiva y causó
la muerte de muchos, incluyendo a Esteban, el primer mártir cristiano.
Pablo había hecho
cosas horribles que era difícil para él olvidar. Pero él tuvo tal revelación del asombroso perdón
de Dios que pudo decir, “olvidando lo que
queda atrás… prosigo hacia la meta para obtener el premio del supremo llamamiento
de Dios en Cristo Jesús.”
Amado, Dios te ha
perdonado todos tus pecados. Él te ha
perdonado completamente y ha declarado: “Nunca más me acordaré de tus pecados e
iniquidades.” (Ver Hebreos 10:17)
Como Pablo, tú puedes
olvidar tu pasado, las equivocaciones que has cometido y las heridas que has
causado a otros o que has pasado por ti mismo. Dios puede tomar las lágrimas del ayer y
transformarlas en los milagros del mañana. Él puede restituir para ti en abundancia todo lo
que has perdido. Él puede hacer que
todas las cosas, incluso los eventos dolorosos de tu pasado, cooperen
conjuntamente para tu bien. (Ver Romanos 8:28)
La Palabra de Dios
dice que “la gloria del Señor será tu
retaguardia.” (Isaías 58:8) Su
gloria cubrirá tu pasado. Dondequiera
que tú vayas, Su gloria cubre tu pasado. Ya no es el mismo pasado que tú conoces porque
Su gloria ha descendido sobre él. Tu
pasado es pasado. Ha sido borrado. ¡Se fue! ¡Así que ya no dejes más que tu pasado te robe
la alegría de hoy!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince
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