recibe pequeños mensajes de gracia todos los días

viernes, 22 de mayo de 2020

Dios Ciertamente Te Mostrará Bondad


Inspiración de Gracia
David le dijo: “No temas, porque ciertamente te mostraré bondad por amor a tu padre Jonatán, y te devolveré toda la tierra de tu abuelo Saúl; y tú comerás siempre a mi mesa.”  (2 Samuel 9:7)
Cuando la gente en el palacio escuchó que el rey Saúl y su hijo Jonathan habían muerto en la batalla, entraron en pánico.  Temerosos de que David viniera a tomar el trono y a matar a todos los hijos y nietos de Saúl, ellos corrieron por sus vidas.  Una enfermera tomó a Mefiboset, el hijo de Jonatán, y corrió.  Pero mientras ella huía, el niño de cinco años se cayó y quedó cojo de ambos pies. (Ver 2 Samuel 4:4)
El pobre muchacho no habría quedado lisiado si ellos hubieran sabido que David realmente amaba a Jonatán y a Saúl, y que iba a cuidar al hijo de Jonatán porque él  había hecho un pacto con Jonatán. (Ver 1 Samuel 18:3)
En esta historia, el rey Saúl representa a la raza humana.  Él es como Adán que pecó contra Dios y perdió todo lo que Dios le dio al hombre.  Él tenía la posición, pero debido al pecado ya no tenía el poder.  Jonatán, que vino después de Saúl, representa a Jesús, quien vino como humano.  Jonatán no era como Saúl —él era bueno, así como Jesús no es como Adán— Jesús es el hombre perfecto.  David representa a Dios.  Así que el pacto de Jonatán con David habla del pacto de Jesús con Dios.  Mefiboset representa a los creyentes de hoy que están de alguna manera “cojos” —enfermos, deprimidos, temerosos, pobres, etc.
Ahora, Mefiboset se quedó cojo debido a las malas noticias que estaban basadas en una mentira.  Muchos creyentes de hoy sufren innecesariamente porque creen cosas equivocadas acerca de Dios.  Piensan: “¡Mi pecado me ha descubierto!  ¡Ahí viene Dios detrás de mí!
Bueno, yo tengo buenas noticias para todos los Mefibosets: ¡David no te persigue por tu vida!  Cuando David buscó a Mefiboset, fue para mostrarle bondad, para cuidarlo y para restaurarle la tierra que había pertenecido a Saúl, su abuelo.
De la misma manera, Dios no anda fuera para atraparte.  Él conoce todo sobre tus pecados y aun así te ama.  Es por eso que Él envió a Jesús como pago por tus pecados.  Y debido al pacto de Jesús con Él, Él te dice: “No tengas miedo, Yo ciertamente te mostraré bondad.  ¡Te devolveré todo y tú comerás siempre a Mi mesa!”
Viendo a través de los ojos de la fe,
Joseph Prince

No hay comentarios:

Publicar un comentario