Y por la ropa, ¿por qué os preocupáis? Observad cómo crecen los lirios del campo; no
trabajan, ni hilan; pero os digo que ni Salomón en toda su gloria se vistió
como uno de éstos.
Mateo 6:28-29
Tú puedes pensar que necesitas
trabajar muy duro para proveer para ti mismo y salir adelante en la vida. Pero Dios
quiere que pienses en los lirios del campo —ellos no hacen nada. No
trabajan, ni hilan, ni se esfuerzan. Sin embargo, crecen y son vestidos por Dios mientras simplemente descansan y toman
el sol del amor de Dios. Y cuando
Dios los viste, estos se ven incluso más gloriosos que el Rey Salomón, el rey
más rico que ha existido.
Así como los lirios del
campo, Dios quiere que tú le permitas a
Él hacerse cargo de proveer para tus necesidades materiales, en vez de que
te esfuerces por ti mismo. ¡Cuando tú sueltes
esta carga y la dejes en Sus manos, vas
a ver a Dios bendecirte sobrenaturalmente, abundantemente y generosamente!
Esto es lo que le sucedió
a uno de los miembros de nuestra iglesia que había estado buscando
trabajo. Inicialmente, recibió solo dos
llamadas para ser entrevistado, después de haber enviado 12 hojas de vida. Rehusándose al desánimo, él creyó que Dios quería
bendecirlo, no solo con un trabajo, sino también con una posición de
influencia.
Dios es fiel. Este
miembro de la iglesia, pronto se convirtió en el gerente de negocios de una
empresa de ingeniería, aun cuando él no tenía experiencia en el campo de la
ingeniería. Le fue ofrecido un muy
atractivo paquete de remuneración, y durante su primera semana en el trabajo,
consiguió que se le pidiera la cotización para dos proyectos. Él sabía que esto era obra de Dios porque era
bastante difícil fijar una cita con gerentes de contratos para discutir
proyectos, y mucho más difícil conseguir que se le permitiera cotizarles no
uno, sino dos proyectos. Al poco tiempo,
se le ofreció la posición para dirigir toda la filial de Singapur, con solo
otro gerente de desarrollo de negocios.
¡Él tenía solo 25 años entonces!
Mi amigo, Dios puede hacer por ti, lo que Él hizo
por esta persona. Solo cree que si Dios viste así a los lirios
y la hierba del campo, que hoy es y mañana se ha ido, ¡cuánto más te vestirá a ti, Su eterno y precioso hijo, con belleza y
favor! ¡Todo lo que Él pide es que
dejes de esforzarte, que le permitas a Él hacerse cargo y que solo fluyas con
Él!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince
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