Inspiración de Gracia
Como el Padre Me ha amado, así también Yo os he amado;
permaneced en Mi amor. (Juan 15:9)
En tu lugar de trabajo, tú probablemente tomas
descansos para tomar café, descanso para almorzar, descansos para el té y
definitivamente descansos para ir al baño.
¿Por qué no hacer lo mismo en tu vida espiritual —tomarte un tiempo libre
para los descansos, especialmente los descansos
de amor?
¿Qué es un descanso de
amor? Es el tiempo que tomas para disfrutar y alimentarte del amor de Jesús
por ti. En cualquier momento del día, en donde sea que estés, encuentra un
lugar tranquilo y aliméntate del amor de Jesús. Solo siéntate y habla con Él. Dile: “Gracias, Jesús, por amarme. No va a pasarme nada que Tú no sepas ya. Jesús, cuando no pude salvarme a mí mismo, Tú
moriste por mí. Tú renunciaste a Tu vida
por mí. ¡Así que yo sé que no hay nada
que Tú no harías por mí!”
Tales descansos de
amor son tipificados en el Antiguo Testamento por Aarón el Sumo Sacerdote y sus
hijos, comiendo el pecho del animal sacrificado. (Ver Levítico 7:31) El pecho del animal habla del amor de Jesús. Hoy, tú
eres un sacerdote de Dios. (Ver Apocalipsis 1:6) Así que, dedica
tiempo a alimentarte del amor de Jesús por ti y mírate a ti mismo alimentado,
fortalecido y sostenido por Su amor. Jesús
es nuestro Sumo Sacerdote hoy. Esto
significa que Su comida está en amarnos.
Él disfruta amándonos y también es “alimentado”
por Su amor por nosotros.
Pero no olvides que el
pecho fue asado por el fuego (véase Levítico 7:35), lo cual habla del juicio de
Dios sobre Jesús mientras Él colgaba de la cruz porque estaba cargando nuestros
pecados. Entonces, mientras te alimentas del amor de Jesús por ti, míralo a Él amándote en
la cruz. Cuando las cosas a tu
alrededor no estén yendo bien, no permitas que el diablo te diga: “Si Dios te
ama, ¿cómo es que estas cosas te están sucediendo?” Amigo, interpreta
el amor de Dios por ti basándote en la cruz, no en tus circunstancias actuales.
Durante el día, cuando
el trabajo sea duro, cuando el ajetreo comience, cuando los problemas se
acumulen o cuando el desánimo llegue, ¡simplemente
para todo y toma un descanso de amor con Jesús! Deja que Jesús te ame. Permítete ser amado por Él. ¡Recuéstate en Su pecho, permanece en Su amor
y sé alimentado por Su amor por ti!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince