Inspiración de Gracia
Y otras semillas cayeron en buena tierra, y creciendo y
desarrollándose, dieron fruto, y produjeron unas treinta, otras a sesenta y
otras a ciento por uno. (Marcos 4:8)
Quizás te han maravillado los milagros de sanidad
instantánea de Dios. Tal vez tú creíste
que Él haría lo mismo por ti. Pero
ahora, cuando ves que tu propia sanidad tarda tanto en manifestarse, te sientes
tentado a rendirte.
Amigo, cuando la
manifestación no llega instantáneamente, no debemos desanimarnos porque Jesús nos dejó un secreto cuando
compartió la parábola del sembrador. (Ver Marcos 4:3–20)
La parábola del
sembrador nos enseña que una vez que nosotros
recibamos la Palabra de Dios en nuestros corazones, con respecto a nuestra
situación, las bendiciones de Dios van a manifestarse progresivamente. Cuando recibimos nuestra manifestación al
treinta por uno, significa que el 70 por ciento de esa condición todavía está
allí. Pero algunos de nosotros nos
rendimos al treinta por uno porque todavía sentimos más dolor que alivio.
¡Necesitamos darnos cuenta de que estamos
treinta veces mejor que antes y que nuestro sesenta por uno está en camino! Una vez que recibamos nuestra manifestación del
sesenta por uno, todavía hay un 40 por ciento que no está bien. ¡Pero
ahora estamos más sanados que enfermos y solo necesitamos prepararnos para la
manifestación del ciento por uno!
Durante años, yo tuve
una afección cutánea. La medicación no
ayudaba y finalmente, después de haber hecho todo lo que sabía hacer, decidí tomar la Santa Cena y orar al respecto.
Le dije: “Padre, tengo una enfermedad. No sé qué está obstaculizando la manifestación
física de esta sanidad. Espíritu Santo, estoy
confiando en Ti para que hagas una intercesión perfecta con respecto a la
manifestación de mi sanidad.”
Así fue como oré por
la condición de mi piel. ¿Crees que me miré
al espejo para ver si esta se había ido? ¡Por supuesto que lo hice! Soy como cualquier otra persona. Pero, ¿crees que dejé de orar? No, yo seguí orando hasta que un día escuché
una voz dentro de mí que decía: “Mira tu cuerpo.” Cuando me miré en el espejo, ¡la condición de
mi piel había desaparecido por completo!
Yo estaba completamente sanado, pero la manifestación de la sanidad fue
gradual.
Hoy, si tú solo ha
visto una mejoría del treinta por uno en tu situación, no te rindas. ¡La mejoría del sesenta y luego del ciento
por uno, están en su ruta hacia ti!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince