Entonces Jesús, cuando hubo tomado el vinagre,
dijo: ¡Consumado es! E inclinando la cabeza, entregó el espíritu.
Juan 19:30
Imagínate mirando el
famoso cuadro de Leonardo da Vinci, Mona Lisa, en el Museo de Louvre. ¿Pensarías en añadir más pinceladas a
este? ¡Por supuesto no! Fue hecho por un maestro, así que ¿qué
podrías tú añadir a esta pintura para mejorarla?
De esta manera es como nosotros debemos ver la obra
de Jesús en la cruz. Él
gritó: “¡Consumado es!” Y no se puede completar un trabajo que está
completo. No se puede terminar un
trabajo que está terminado. Nuestra
salvación está ganada. Nuestros pecados
están todos perdonados. Nosotros hemos
sido hechos para siempre justos por Su sangre.
¡Cristo pagó completa y perfectamente por nuestro perdón y justificación
totales, y por toda clase de bendiciones!
De hecho, estas dos
palabras: “Consumado es,” provienen
de la palabra griega teleo. En los días de Jesús, un siervo las usaría
para informar a su amo: “He completado
el trabajo que me fue asignado.” (Juan 17:4) La palabra significa: “¡Está terminado, permanece terminado y por siempre estará
terminado!” Quizás el significado
más importante de teleo es la forma
en que es utilizada por los comerciantes: “¡La
deuda ha sido completamente pagada!” Cuando
Jesús se entregó a Sí Mismo en la cruz, Él cumplió completamente con las
demandas de justicia de la ley. ¡Él pagó
nuestra deuda en su totalidad!
Hoy, no son nuestras
obras las que nos traerán las bendiciones.
Es la obra terminada de
Cristo. La vida cristiana no se basa en
hacer, sino en creer en Su obra terminada.
Bajo la ley, nosotros debemos hacer.
Bajo la gracia, ¡ya fue hecho!
Tal vez hoy estás
enfrentando obstáculos enormes. Jesús promete: “¡Consumado es!” ¡Tú no
vas a ser liberado porque tú ya has sido liberado! ¡Tú no vas a ser sanado porque tú ya fuiste
sanado! ¡Dios te sanó hace 2,000 años! Isaías 53:5 declara: “¡Por Sus heridas tú has sido sanado!” Tú estás embarazado de sanidad. ¡Mantente descansando en Su obra terminada y
ésta se manifestará!
Mi amigo, el trabajo está terminado. La
victoria está ganada. Nuestros enemigos han sido hechos el
estrado de Sus pies. ¡Nuestras
bendiciones han sido compradas por Su sangre! Vive la vida sabiendo que no hay nada que tú
tengas que hacer —¡Sólo creer! ¡Está
terminado!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince}