Pues el Señor mismo descenderá del
cielo con voz de mando, con voz de arcángel y con la trompeta de
Dios, y los muertos en Cristo se levantarán primero.
1 Tesalonicenses 4:16
Alrededor del mundo, los
judíos celebran el año nuevo judío o Rosh
Hashaná, generalmente en el mes de septiembre. Esta fiesta se celebra con el sonido de las
trompetas —el shofar o cuerno de carnero. Es por eso que también se conoce como la
Fiesta de las Trompetas.
Los judíos celebran
siete fiestas: Pascua, Panes sin Levadura, Primicias, Pentecostés, Trompetas,
Expiación y Tabernáculos. Las cuatro
primeras han sido cumplidas literalmente por Jesús. Él era el Cordero Pascual (1 Corintios 5:7), el
Pan de Vida (Juan 6:35) y las Primicias de los que durmieron (1 Corintios
15:20). Y cuando Pentecostés llegó
plenamente después de Su ascensión, Él nos envió al Espíritu Santo (Hechos
2:1-4).
Así que, la próxima
fiesta que estamos esperando que Jesús venga a cumplir literalmente, es la
Fiesta de las Trompetas. ¿Por qué es
esta fiesta importante para nosotros? ¡Porque cuando Jesús la cumpla, significa
que vamos a encontrarnos con Él en las nubes!
Estoy hablando del rapto
de la iglesia. Cuando la trompeta suene, “en un
abrir y cerrar de ojos”, nosotros los que vivimos seremos transformados. ¡Vamos a ponernos cuerpos nuevos que serán
como el de Jesús! Los que están muertos
en Cristo resucitarán y también recibirán nuevos cuerpos. Ellos ascenderán primero, seguidos por
nosotros los que vivimos, y todos vamos a encontrar al Señor en el aire. (1
Corintios 15:51-55)
¡Esto significa que hay
una posibilidad de que tú no veas muerte! La Biblia dice: “Entonces nosotros, los que estemos vivos y que permanezcamos,
seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes al encuentro del
Señor en el aire”. (1 Tesalonicenses 4:17)
Una cosa es estar vivo, pero otra
permanecer con vida.
Yo creo que hay una
generación de cristianos que conoce el
poder de la resurrección del Señor.
Ellos saben cómo caminar en su
herencia, y detener la enfermedad y
la muerte hasta la venida del Señor.
Mi amigo, puedes ser considerado como uno de ellos, ¡si tomas al Señor Jesús y Su obra terminada como tu victoria sobre la
enfermedad y la muerte!
Viendo a través de los
ojos de la fe,
Joseph Prince